- El centro empezó a suministrar el sábado las primeras dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech a los trabajadores que, pese a la nevada, pudieron acudir a su jornada laboral, priorizando aquellos que se encuentran en primera línea
- El hospital compatibilizó el inicio de la campaña de vacunación con la gestión de la situación de emergencia generada por el temporal de nieve gracias al trabajo interno de gestión y coordinación de necesidades; el esfuerzo, profesionalidad y compromiso de todos sus trabajadores; y la ayuda de los servicios de emergencia, cuerpos de seguridad y voluntarios
Dentro de la estrategia de control de la pandemia generada por la Covid-19, y tras el envío el pasado viernes noche del primer lote de vacunas frente al coronavirus por parte de la Comunidad de Madrid a una docena de centros hospitalarios de la red pública regional, la Fundación Jiménez Díaz inició el sábado la campaña de vacunación a sus profesionales sanitarios de primera línea, compatibilizando esta importante tarea con la gestión de la situación de emergencia generada por el temporal de nieve Filomena, igualmente prioritaria.
Así, el hospital madrileño empezó a administrar el sábado por la mañana las primeras dosis de la vacuna Comirnaty® -Vacuna Covid-19 mRNA, de Pfizer-BioNTech, aprobada por la Agencia Europea del Medicamento (EMA)-, priorizando el personal de unidades y servicios críticos, como Urgencias, UCI, UCIR (Unidad de Cuidados Intermedios Respiratorios) y plantas de Hospitalización de pacientes Covid, y continuando con el resto de resto de áreas asistenciales de profesionales que trabajaron el fin de semana. Desde ese día y hasta ayer, cerca de 1.700 profesionales del centro han sido vacunados.
Adicionalmente, los otros tres hospitales públicos gestionados por Quirónsalud en la Comunidad de Madrid, los hospitales universitarios Rey Juan Carlos (Móstoles), Infanta Elena (Valdemoro) y General de Villalba (Collado Villalba), también iniciaron durante el fin de semana la campaña de inmunización frente al coronavirus a sus trabajadores que, pese a la nevada, pudieron acudir a su jornada laboral en sus diferentes turnos.
Concretamente, el Hospital Universitario Rey Juan Carlos empezó a inmunizar a su personal el domingo por la mañana, un día después de recibir las vacunas; seguido apenas horas más tarde por los centros hospitalarios Infanta Elena y General de Villalba, a donde Filomena impidió la llegada de las dosis hasta esa misma jornada. El primero ha logrado administrar unas 744 vacunas entre sus profesionales entre ese día y ayer, mientras que los segundos sumaron cerca de 350 y más de 270, respectivamente, en sus dos primeras jornadas de inmunización frente a la Covid-19. En total, los cuatro hospitales superan los 3.000 profesionales vacunados desde el fin de semana.
Gestión paralela de la emergencia generada por Filomena
La puesta en marcha de la estrategia de inmunización frente al coronavirus y la necesaria gestión paralela de la situación de emergencia generada por el temporal que afecta a la Comunidad de Madrid desde el pasado viernes fueron posibles en la Fundación Jiménez Díaz como resultado del trabajo interno de gestión y coordinación de necesidades; el esfuerzo, profesionalidad y compromiso de todos sus trabajadores; y la ayuda de los servicios de emergencia, cuerpos de seguridad y voluntarios, lo que posibilitó la atención a ambas prioridades para la salud pública.
«La actividad básica del hospital estuvo cubierta a lo largo de todo el fin de semana gracias a la disponibilidad de su personal, que se volcó con la situación cubriendo de forma coordinada los puestos de los trabajadores que no pudieron acudir al hospital debido al temporal», afirma el Dr. Javier Arcos, director médico del hospital.
Los servicios asistenciales se mantuvieron por tanto operativos -el Servicio de Urgencias realizó el sábado un centenar de atenciones, a las que se sumaron 177 el domingo- y se ha contó con el material y productos médicos necesarios para garantizar la normalidad en el funcionamiento del centro, que además habilitó números de teléfonos para atender emergencias en especialidades como Pediatría, Obstetricia, Oncología o Cuidados Paliativos.
Por otra parte, dentro del hospital se habilitaron las instalaciones y suministro de comidas durante la estancia de pacientes y acompañantes, incluidos aquellos a los que se dieron de alta desde el viernes pero que no pudieron irse a sus domicilios debido al temporal, así como del personal que no puso o quiso abandonar el centro. Las telecomunicaciones, internet y telefonía permanecieron operativas en todo momento.
Igualmente, añade el Dr. Arcos, «desde la llegada a Madrid de Filomena, la Fundación Jiménez Díaz solicitó los mecanismos de emergencia para la retirada de nieve y adecuación de accesos, lo que, gracias a la inestimable ayuda de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y la Agencia de Seguridad y Emergencias de Madrid (112), se consiguió en un alto porcentaje y en un tiempo razonable, al igual que el transporte y recepción de suministros médicos y materiales». «Su colaboración, junto a la del cuerpo de Bomberos, la Guardia Civil, el Samur-Protección Civil y numerosos voluntarios que utilizaron sus vehículos 4×4, también fue clave para la llegada y salida de profesionales sanitarios, así como de pacientes, facilitando el alta de unos 40 de ellos, incluidas más de 15 puérperas», apostilla el director médico del centro.
El hospital lleva desde el viernes en comunicación y coordinación permanente, tanto con la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid como con el grupo Quirónsalud, al que pertenece, para mantener y garantizar el operativo mientras dure la situación actual.
Comirnaty®, Vacuna Covid-19 mRNA
Las primeras vacunas que se están administrando en España son las fabricadas por la compañía Pfizer: Comirnaty Vacuna COVID-19 mRNA. Se trata de una vacuna de ARN mensajero monocatenario que codifica la proteína viral S (espícula) del SARS-CoV-2, según se especifica en su información técnica.
La formulación del ARNm en nanopartículas lipídicas permite su entrada en las células del huésped sin degradarse. La expresión de la información genética por la maquinaria celular produce la proteína S del SARS-CoV-2, que se muestra en la superficie de la célula. La detección de este antígeno induce una respuesta inmune frente al antígeno S, tanto de anticuerpos neutralizantes como de inmunidad celular, que es la base de la protección frente a la Covid-19. Al no contener virus vivos completos, la vacuna no puede producir la enfermedad, y el ARNm se degrada en unos pocos días de forma natural.
La edad mínima de administración de la vacuna es de 16 años. Se administra por vía intramuscular en deltoides una vez diluida. La pauta de vacunación son 2 dosis de 30 mcg / 0,3 ml, separadas cada una al menos 21 días entre sí, y siendo el intervalo mínimo para la segunda dosis de 19 días tras la primera.
Los ensayos clínicos, en los que han participado decenas de miles de personas, y los estudios disponibles han mostrado una elevada protección frente a la enfermedad provocada por el coronavirus en las personas que recibieron la vacuna. Por ello, la vacunación supone, según la evidencia científica actual, una actuación sanitaria beneficiosa tanto para la persona que la recibe como para la sociedad en su conjunto.