El Tesoro Público prevé captar este jueves entre 750 y 2.250 millones de euros en su penúltima emisión del año en la que ofrecerá a los inversores deuda a largo plazo para prácticamente culminar su programa de emisiones en un año marcado por la crisis del Covid-19 que le ha llevado a realizar tres modificaciones en su previsión de emisiones.
La penúltima emisión del año se producirá después de que el Congreso respaldase por mayoría los Presupuestos Generales del Estado (PGE) el pasado jueves para remitirlos al Senado, donde llegan el miércoles para continuar su tramitación parlamentaria.
El organismo afronta las últimas subastas de un año marcado por la crisis del Covid que le ha llevado a acometer en tres ocasiones cambios en su programa de financiación. De hecho, recientemente la vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, anunció una nueva reducción del programa de emisiones del Tesoro de este año en otros 5.000 millones de euros, por lo que la emisión neta se situará en 110.000 millones de euros en 2020.
En este contexto, este jueves ofrecerá obligaciones a 10 años, con cupón del 1,25%, y obligaciones a 10 años indexadas a la inflación, con cupón del 0,65%. La referencia para medir la evolución del coste de financiación es el tipo de interés marginal del 0,230% registrado el pasado 1 de octubre y el interés del -0,768% marcado en una emisión del 6 de agosto.
La emisión de este jueves será la penúltima del año, ya que tras la última reducción de emisiones de su programa el Tesoro no convocará la subasta de bonos y obligaciones del Estado prevista para el jueves día 17, por lo que la última subasta del mes de diciembre y del año será la del martes día 15 de letras a 3 y 9 meses.
A pesar de las consecuencias de la crisis del Covid-19 desatadas desde el mes de marzo, los inversores han mantenido su confianza en la deuda pública española, marcando mínimos en los tipos y reduciendo los costes hasta mínimos históricos del 1,85%, en paralelo a un alargamiento de la vida media de la carta, en máximo histórico de 7,82 años.
De hecho, en su última emisión del pasado 1 de diciembre captó 2.647 millones de euros en letras a 6 y 12 meses, en el rango alto previsto, y volvió a registrar nuevos mínimos históricos en los tipos de ambas denominaciones.
TRES REVISIONES DEL PROGRAMA POR EL COVID
El programa de financiación del Tesoro para 2020 ya fue revisado por primera vez en mayo al alza en 100.000 millones como consecuencia de las mayores necesidades por la crisis del Covid-19, pero se varió de nuevo el pasado 8 de octubre para reducirse en 15.000 millones, sumándose ahora otra nueva rebaja de 5.000 millones.
De este modo, sobre la previsión de emisión neta de 130.000 millones anunciada en mayo para hacer frente a las necesidades adicionales motivadas por el Covid-19, la emisión neta se situará en 110.000 millones de euros y la emisión bruta en unos 277.000 millones de euros.
Calviño explicó que estas menores necesidades de financiación se explican por una evolución de los ingresos más favorable que la prevista a principios de octubre, con mayores ingresos tributarios ante la recuperación de la actividad económica a partir del tercer trimestre. Además, las amortizaciones anticipadas por parte de las CCAA de préstamos de los Fondos de Financiación han continuado.
EMISIÓN RÉCORD EN 2021
Conforme a las proyecciones del proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado de 2021, la emisión bruta por parte del Tesoro Público registrará el próximo año una nueva cifra récord de 299.138 millones de euros, un 6% más que el ejercicio anterior.
El endeudamiento neto del Tesoro Público en 2021 ascenderá aproximadamente a 110.000 millones de euros; las letras aportarán alrededor de 10.000 millones de financiación neta, mientras que los bonos y obligaciones del Estado, junto con el resto de deudas en euros y en divisas, aportarán los restantes 100.000 millones para cubrir la totalidad de las necesidades de financiación neta previstas.
Además, el secretario general del Tesoro y Financiación Internacional, Carlos San Basilio, ya avanzó que el organismo realizará en 2021 su primera emisión de un bono ‘verde’, que se prevé que sea sindicada y de entre 5.000 y 10.000 millones de euros, según «el apetito» que presente el mercado en ese momento, aunque con la intención de alcanzar un nivel de liquidez de 20.000 millones a largo plazo con sucesivas reaperturas.