
Los autónomos no necesitan ser expertos en cuestiones tributarias, pero sí deben saber lo suficiente de impuestos como para asegurarse de que están cumpliendo correctamente con sus obligaciones fiscales. De ahí la importancia de que un autónomo sepa manejar conceptos básicos como los de retenciones e ingresos a cuenta.
Existen diferentes rentas sujetas a retención, así como diferentes personas físicas y jurídicas obligadas a practicar esa retención e ingresar posteriormente el dinero en Hacienda. Es fundamental hacer estos trámites bien para evitar sanciones, sin importar si eres quién sufre la retención sobre sus ganancias o quién debe hacer el ingreso a cuenta.
5Autónomo: obligaciones formales de las retenciones e ingresos a cuenta

En el caso de los autónomos estos deben presentar trimestralmente el modelo 130 para liquidar el IRPF. En él se especificarán las cantidades que han sido retenidas y que, por tanto, Hacienda debería recibir en concepto de ingreso por parte de los clientes del autónomo. Si se estima que durante el trimestre el autónomo ha ganado más de lo previsto inicialmente, el resultado de la liquidación será que debe abonar una determinada cantidad que complementará las retenciones e ingresos a cuenta.
Quienes reciben facturas de autónomos y tienen que practicar ingresos a cuenta lo declaran de forma trimestral a través del modelo 111. Una vez presentado este documento el interesado tiene un plazo para cumplir con su obligación. Y hacer el correspondiente ingreso a la Agencia Tributaria. Anualmente se presenta además el modelo 190, que es un resumen de todos los ingresos a cuenta practicados en el ejercicio fiscal.