Hace dos décadas, Mango apostó por el canal digital. Transcurrido este tiempo, los números le dan la razón. De enero a octubre, la facturación online ha superado en más un 5% los resultados cosechados en 2019, periodo en el que las ventas alcanzaron la cifra de 564 millones de euros.
Para este atípico 2020, Mango espera acabar el año con una facturación a través del canal online de 800 millones de euros. Por tanto, se trataría de un 40% por encima de los datos de 2019. Y, todavía va más allá. Para 2021 quiere que esa cifra llegue a los 1.000 millones de euros. «Es incierto saber si alcanzaremos esas cantidades. Es difícil de calcular. No sabemos si habrá vacuna o si podremos volvernos a reunir», ha matizado Elena Carasso, responsable del comercio online y miembro del comité de dirección de Mango.
Para conseguirlo, Mango ha aumentado un 30% la inversión en el marketing digital fruto del cierre de tiendas y el auge del comercio online. Asimismo, va a redimensionar sus tiendas. Esto último se debe a los cambios de comportamiento que está sufriendo el consumidor. «Tenemos mucha incertidumbre con el canal físico. No tenemos seguridad de cuándo volverá la normalidad. Vamos a sustituir tiendas pequeñas por otras más grandes según lo demanden los clientes», ha indicado Elena Carasso.
INVERSIÓN DE MANGO
Que el canal online es importante para Mango da buena muestra el siguiente dato: ha invertido 150 millones de euros durante los tres últimos años. Gracias a esta inversión, está presente online en 83 países.
Mango también ha ampliado los periodos de devolución, ha optimizado sus bases de datos, y se ha visto obligada a hacer numerosos movimientos de stock para preparar la reapertura de tiendas. Movimientos que no han servido para recuperar la caída en el canal físico.
Hay que remontarse a 1996 para ver la primera página web de la marca. El comercio electrónico apareció en el año 2000 y, tres años después, ya suponía para Mango unos ingresos de un millones de euros. Una década después, ese millón se transformó en 100 millones.
Los proyectos a medio y largo de Mango abarcan la hiper personalización de la experiencia del cliente; la mejora de la post compra; y hacer partícipes de la omnicanalidad a los partners y a las franquicias asociadas.