Las casas rurales son de los únicos sectores que cierran una buena campaña de verano

El sector turístico está sufriendo una de las peores crisis de su historia a causa de la pandemia de coronavirus. Muchos hoteles, agencias de viaje y locales de restauración corren el peligro de tener que bajar sus persianas y, en muchos casos, de no poder volver a levantarlas.

Sin embargo, dentro de este auténtico desastre, el turismo rural parece ser el único capaz de hacer frente a este parón de la actividad, llegando incluso a alcanzar cifras de ocupación nunca vistas con anterioridad. El alojamiento en casas rurales con encanto está suponiendo la mejor vía de escape para todas esas personas que, aún en las actuales circunstancias, quieren seguir disfrutando de sus vacaciones.

La propia naturaleza de las casas rurales, ubicadas en lugares sin aglomeraciones, convierten a esta modalidad de alojamiento turístico en la ideal para cumplir con las normativas y recomendaciones sanitarias, disminuyendo sustancialmente cualquier posibilidad de contagio.

El doble de reservas en casas rurales que el año pasado

Lo que en años anteriores era una clara tendencia se ha convertido en un auténtico boom este año a causa de las restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus. La búsqueda de espacios libres de Covid-19 ha impulsado las reservas de casas rurales hasta más del doble, en algunos casos, en relación con el año 2019.

Durante la temporada turística de verano, los grandes triunfadores en el sector han sido los pueblos con menos de 5000 habitantes y las casas rurales, especialmente las que cuentan con piscina entre sus prestaciones.

De igual forma, las estancias han sido más duraderas que en años anteriores, dejando atrás las clásicas escapadas rurales de fines de semana o de semanas completas para optar por estancias de 15 días a un mes.

Entre los aspectos que más se valora a la hora de alquilar una casa rural se encuentra la posibilidad de realizar numerosas actividades al aire libre, como senderismo, escalada, ciclismo, etc., muy saludables en cualquier momento y, especialmente, en la actual situación de pandemia, alejando cualquier posibilidad de contagio por aglomeraciones.

Entre las comunidades autónomas españolas que han experimentado un mayor crecimiento en las reservas de casas rurales destacan Cataluña, Andalucía y Castilla y León.

Espectacular crecimiento del turismo rural en la Costa Brava y Girona

El aumento de la actividad en casas rurales ha sido muy significativo en Cataluña, con un especial énfasis en la provincia de Girona y la Costa Brava.

Además de los maravillosos paisajes, excelente clima y completos servicios de la zona, este éxito no es ajeno a la enorme labor desarrollada desde hace años por empresas como Naturaki, que gestiona actualmente cerca de 90 casas rurales situadas en las comarcas del Gironés, La Garrocha, Pla de l’Estany y Alto y Bajo Ampurdán.

Desde el año 2011, Naturaki gestiona en exclusiva las mejores casas rurales de Girona y la Costa Brava, todas ellas minuciosamente seleccionadas para ofrecer la máxima calidad, evitando cualquier tipo de desagradable sorpresa a sus clientes.

La mayor parte de las casas rurales de Naturaki ofrecen zonas ajardinadas, piscina, entretenimientos y juegos para los más pequeños. También son mayoría las casas que admiten mascotas, por lo que no hay ningún problema para pasar las vacaciones en compañía de nuestros queridos y peludos amigos.

La recuperación del fundamental sector turístico español pasará inevitablemente por la consolidación de las casas rurales como destino vacacional. Las actuales circunstancias de pandemia convierten a este tipo de alojamiento de alquiler en el más seguro para evitar contagios, y la habitual alta fidelización de sus clientes auguran que el boom de los destinos rurales continuará en los tiempos post-Covid.