La Comisión Europea estudia aprobar la fusión entre los grupos automovilísticos PSA y Fiat Chrysler Automobiles (FCA) antes del plazo establecido por las autoridades comunitarias, que apuntaron al 2 de febrero de 2021 como fecha límite.
Según fuentes cercanas al proceso de aprobación, las acciones que llevarán a cabo ambas empresas para disipar las preocupaciones de la Unión Europa (UE) sobre una posible reducción de la competencia han recibido el visto bueno por parte de otras compañías del sector y de los clientes, por lo que no tendrán que ser modificadas. Gracias a ello, la Comisión podría aprobar el acuerdo antes de la fecha límite, según recoge Bloomberg.
Fuentes de la Comisión Europa han asegurado que todavía no se ha tomado una decisión al respecto de la fusión y se han limitado a recordar que la fecha límite para resolver el caso es el 2 de febrero de 2021.
Todo ello después de que el pasado mes de junio Europa abriese una investigación en profundidad sobre la fusión entre ambos consorcios automovilísticos ante la sospecha de que la operación pudiese reducir la competencia en el mercado de furgonetas en catorce países de la UE, entre ellos España.
El Ejecutivo comunitario tomó esta decisión ya que detectó indicios de que la fusión reduciría «significativamente» la competencia dentro del mercado único en el sector de vehículos comerciales ligeros (con un peso inferior a 3,5 toneladas) en Bélgica, Croacia, República Checa, Francia, Grecia, Hungría, Italia, Lituania, Luxemburgo, Polonia, Portugal, Eslovaquia, Eslovenia, España y Reino Unido.
En muchos de estos países, remarcó Bruselas, las dos firmas automovilísticas «combinadas» ostentarían una «elevada» cuota de mercado con «el abanico más amplio de marcas y modelos de todos los tamaños». La Comisión señala que PSA y Fiat serían «particularmente fuertes» en el segmento de furgonetas pequeñas.
Este mercado «parece caracterizarse por unas barreras relativamente altas» tanto para entrar en él como para expandirse, según el análisis del Ejecutivo comunitario, que aseguró además que PSA y Fiat Chrysler han «competido históricamente» en este sector, por lo que la fusión «eliminaría un importante obstáculo» para ambos.
«Examinaremos detenidamente si la transacción propuesta tendría un impacto negativo a la competencia en estos mercados y garantizaremos que siga existiendo un entorno sano de competencia a disposición de ciudadanos y empresas que utilizan furgonetas comerciales en su trabajo», resumió la vicepresidenta responsable de Competencia de la Comisión Europea, Margrethe Vestager.