La mayoría de los experimentos gastronómicos, cuando se realizan por primera vez se consideran prácticamente sacrilegios. Pasa siempre que alguien decide improvisar, y modificar – añadir o restar – un ingrediente considerado fundamental en una receta tradicional. En esta ocasión, ha sucedido con la paella, pero la polémica no ha sido en torno a un ingrediente, sino en torno a su envasado. Y es que hemos descubierto una paella en lata digna de un restaurante con estrellas Michelín. ¿No te lo crees? Sigue leyendo.
5La crítica

Pues El Paeller ha sido bien recibido por crítica y público. Tanto que ya se están trabajando en aumentar las especialidades: paella de verduras, será la siguiente. Al fin y al cabo, la elaboración del caldo es la misma que si la hiciéramos en nuestra casa a fuego lento, solo que nos han ayudado a acortar el proceso. Algo muy importante en los tiempos que corren, y que se agradece. Tanto o más, que poder tener el placer de terminar la paella en tu propia casa y quedarse con ese sentimiento de satisfacción de una receta bien hecha.