domingo, 15 diciembre 2024

El magnate del mundo del toro vuelve a España ante el colapso de la industria taurina

Alberto Baillères lleva muchos años como uno de los nombres propios del mundo del toro. En España, su firma Global Gudea se ha consolidado como una referencia de la fiesta nacional. Las ferias de Salamanca, Badajoz o Madrid han llevado su sello últimamente. También se erigió como protagonista en el otro lado de la fiesta, esto es en la cría del protagonista de toda la parafernalia: el toro. De hecho, el grupo liderado por el mexicano adquirió en 2014 el reconocido hierro de Zalduendo. Pero su expansión ha chocado de frente con la pandemia actual y ahora el covid-19 amenaza con hacer una brecha profunda en su conglomerado.

El mundo del toro ha sido uno de los grandes damnificados por la pandemia actual. De hecho, el coronavirus ha impedido la realización de las grandes ferias españolas, lo que ha supuesto un varapalo para la industria cuyos efectos todavía no se perciben. Algunas de ellas, como la de San Isidro, son el gran alimento para las cuentas del conglomerado de Bailléres que ahora se tambalea más que nunca. De hecho, los administradores de la sociedad se han visto obligados a moverse en las últimas semanas para apuntalar la compañía.

Así, esta misma semana Global Gudea se vio obligada a engullir su filial Nueva Plaza de Toros de Badajoz para contener las pérdidas ocasionadas por el covid-19. La compañía perteneciente al grupo que más valor en libros posee, lo que le puede ayudar a cerrar el año lejos de la quiebra. Pese a que los datos todavía no han transcendido, las últimas cuentas presentadas por el grupo delatan que la compañía ya pasaba por problemas financieros años antes. De hecho, la firma matriz presenta pérdidas en sus tres últimos años declarados: 2,2 millones en 2016, 2,05 millones al siguiente y 1,89 en 2018.

BAILLÉRES ABSORBE UNA FIRMA CON MÁS DE CINCUENTA AÑOS DE HISTORIA

Nueva Plaza de Toros de Badajoz es una de las firmas históricas del mundo del toro. Sus comienzos se remontan al año 1965, cuando se convirtió en la columna vertebral de la fiesta brava en Extremadura. Ya en la década de los noventa, la marca se especializó en el apoderamiento y representación de rejoneadores, novilleros y matadores de toros. Sus administradores por aquel entonces eran el reconocido empresario taurino Jesús Martínez Flamarique junto al que era su primo Javier Martínez Uranga.

La saga familiar que provenía de la familia Martínez Elizondo, que incorporaba otros muchos nombres, junto al también histórico Pedro Balaña Forts conformaban la cabeza visible empresarial del mundo del toro. Así, la administración de dicha sociedad se convirtió en uno de los honores más codiciados de la industria. A Flamarique y Uranga les siguió el conocido empresario cordobés Pablo Martínez Labiano (otro Chopera más) que a su vez administraba los cosos de Bilbao, San Sebastian o Salamanca. También en aquellos años apoderaba a dos figuras del arte del toreo como Pablo Hermoso de Mendoza o Leandro Marcos.

El recorrido español de la compañía cuyo nombre ya ha desaparecido para siempre, una vez integrada en Global Gudea, acabó en 2017. En aquel momento, se hizo efectivo que Nueva Plaza de Toros de Badajoz formaría parte del creciente conglomerado que había conformado el segundo hombre más rico de México, Alberto Bailléres. Ahora, ese mismo grupo ha terminado por absorber la firma histórica, después de que el día 31 de agosto se hiciese público, según registra el Borme posteriormente, que no exitían obstáculos para la operación.

LAS DISTINTAS FILIALES DE BAILLÉRES EN ESPAÑA

La absorción de Nueva Plaza de Toros de Badajoz posibilitará a Global Gudea apuntarse más de 850.000 euros de capital, su valoración en libros, una vez se haya completado con éxito la operación. Un movimiento que puede ayudar a cuadrar las cuentas en un año muy complejo. De hecho, si las pérdidas, todavía desconocidas, superan el patrimonio neto de la compañía, que ascendía a 9,1 millones en 2018, se daría lugar a una quiebra técnica. En esa situación los inversores deberían inyectar capital o, como alternativa, engullir sociedades para amortiguar el golpe financiero como ha hecho en este caso.

La compañía con sede en Badajoz no es la única filial ligada al conglomerado formado por Baillerés en España. Aunque sí era la que más patrimonio neto, valor en libros, tiene seguida por Coso de Badajoz; Toreo, Arte y Cultura BMF; Global Romuva y, por último, Ruedo de Olivenza. Entre todas ellas, incluida la firma absorbida, suponen cerca de dos millones de euros que en caso de que la situación se complique más pueden servir de colchón financiero para Global Gudea.

Al final, el covid-19 va a crear una situación insostenible en una industria además que se le ha perjudicado sistemáticamente. De hecho, a lo largo de los últimos meses se han sucedido las denuncias por redes sociales, los movimientos espontáneos e incluso la tensión ha ido a más. Los primeros y más damnificados han sido aquellos que viven de este negocio, como jóvenes toreros y sus cuadrillas o muchos ganaderos, pero un año más en sequía podría terminar por resquebrajar el tejido empresarial más fuerte del sector. Una tragedia nunca vista. Aunque también una oportunidad sin precedentes para atesorar más poder, más si cabe cuando eres uno de los hombres más ricos del mundo.  


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