Las grandes cadenas hoteleras españolas deben mantener una situación de calma tensa en lo que resta de verano. En un ejercicio normal, el mes de septiembre todavía tendría semanas de temporada alta, pero este año todo es distinto. Y por si fuera poco, todas las compañías turísticas en su conjunto se enteran de lo que sucede como el resto de españoles.
Sin privilegios para nadie. Riu, Meliá, Barceló, Iberostar… las principales hoteleras cuyo negocio depende mucho de la época vacacional no saben nada sobre qué les espera en las próximas semanas. Tanto, que sus estrategias comerciales y de marketing son pura intuición. Asumen que puede haber restricciones a la movilidad, y que ahora las comunidades autónomas pueden pedir estados de alarma concretos, como ha indicado el presidente del Gobierno este martes. Pero desconocen todo lo demás.
La cadena dirigida por Gabriel Escarrer asegura a MERCA2 que ellos, de momento, no han tenido ningún tipo de ‘feedback’ por parte de la administración sobre las acciones que se llevarán a cabo las próximas semanas. Por lo tanto, Meliá Hotels debe lidiar con la situación, que encima anda revuelta en los mercados, sin tener concreción alguna ante el cierre de comunidades autónomas.
Misma situación señalan desde Iberostar. La cadena de la familia Fluxá asume que la situación es tan cambiante que no se puede hacer nada. En Riu, van más allá, y fuentes de la compañía aseguran a este medio que su intención es mantener el mayor número de hoteles abiertos durante el tiempo que puedan. Y también son muy pragmáticos, entienden que ahora mismo no se puede hacer nada porque, oficialmente, no hay nada sobre la mesa. De esta forma, la familia Riu se prepara para cualquier cambio en cualquier momento.
Y precisamente los cambios parecen ser la tónica del sector. Desde Barceló Hotel Group señalan que «las restricciones [a países europeos] son de momento hasta finales de este mes, por lo que es pronto para sacar conclusiones. Estamos analizando la evolución de las reservas para los próximas semanas y, si se mantiene la demanda, mantendremos la apertura de los hoteles durante el tiempo que sea posible». No obstante, al igual que el resto de hoteleras del sector, confirman que no han tenido ninguna comunicación o aclaración por parte del Gobierno de lo que sucederá en los próximos días.
LAS RESERVAS CONTINÚAN
Por ahora la mayoría de hoteles mantienen abiertos los establecimientos que, estratégicamente, habían decidido cuando empezó esta atípica temporada de verano. Aunque hay en algunas localizaciones donde ya están ejecutando cierres o controles de aforo con el objetivo de reducir gastos ante la falta de clientes.
Y es que desde hace semanas España se ha puesto en el foco de la mala gestión del coronavirus y diversos países recomiendan no viajar a nuestro país o, como medida disuasoria a sus ciudadanos, les obligan a cumplir cuarentenas, con la complicación social que eso implica.
Los casos de Reino Unido por parte de su Gobierno; o de Alemania, a través del touroperador Tui, han provocado que hoteleras como Riu, Meliá, Barceló o Iberostar tengan un septiembre más complicado de lo ya esperado.
A eso hay que añadir, como señala el conjunto del sector, la total incertidumbre con la que afrontan la próxima quincena. Lo asumen con cierta deportividad, sobre todo una vez que el Gobierno ha traspasado toda responsabilidad a las comunidades autónomas a la hora de decretar restricciones en la movilidad o cualquier otro tipo de medida. Y eso, lógicamente, puede generar un agravio a las cadenas hoteleras que tienen gran parte de su negocio en las zonas más turísticas.
Pero las decisiones serán discrecionales y dispares en cada región. Eso implica que las hoteleras deberán tomar decisiones globales asumiendo que puede no haber ningún tipo de restricción en la Comunidad de Madrid, pero sí en Canarias, con lo que eso implica por los emisores de turismo.
