Por regla general, todos tenemos un bote de polvos de talco en casa. Aunque lo más habitual es usarlos para cuidar la piel del bebé, ya que evita que su sensible piel se irrite. Seguramente lo utilices para evitar el roce de las piernas y poco más, lo cierto es que este producto tiene muchos más usos de los que podrías imaginar.
Los polvos de talco son realmente útiles cuando conoces todos los usos que puedes darle y los llevas a cabo. No solo ahorrarás en la compra de otros productos, si no que mejorará tu vida notablemente. Sigue leyendo cuáles son estos trucos para sacarle el máximo partido.
Acaba con las hormigas con los polvos de talco
Saber aprovechar los polvos de talco puede suponer un gran ahorro de dinero en tu hogar, ya que son muchos los productos a los que va a poder sustituir. Teniendo en cuenta que es un producto que usamos para el cuidado de la piel de los bebés, no debemos preocuparnos por si alguno de estos usos resulta ser peligroso, ya que no lo es.
El primero de los usos que le podemos dar a los polvos de talco, y que jamás te habrías imaginado, es el de espantar a las hormigas. No las va a matar, pero su olor es molesto para estos insectos, por lo que las echará definitivamente de tu hogar. Localiza todas las zonas en las que estas indeseables aparecen y espolvorea un poco de talco. Verás cómo dejan de aparecer por tu hogar enseguida. Ya no vas a necesitar comprar caros repelentes que podrían ser tóxicos al alcance de un niño pequeño, todo son ventajas.
