El banco estadounidense Citigroup registró un beneficio neto de 1.316 millones de dólares (1.157 millones de euros) en el segundo trimestre de 2020, lo que equivale a una contracción del 72,6% en comparación con el mismo periodo del año anterior, según ha informado la entidad, que incrementó un 277% la partida destinada a cubrir el coste de crédito, hasta 7.903 millones de dólares (6.949 millones de euros).
La cifra de negocio de Citigroup entre abril y junio creció un 5,4% interanual, hasta 19.766 millones de dólares (17.379 millones de euros), con un incremento del 21% del negocio de clientes institucionales, hasta 12.137 millones de dólares (10.672 millones de euros), mientras que el área de banca de consumo disminuyó un 10% sus ingresos, hasta 7.339 millones de dólares (6.453 millones de euros).
En el segundo trimestre, Citigroup destinó 7.903 millones de dólares (6.949 millones de euros) a provisionar el riesgo de crédito, lo que supone un incremento del 277% en comparación con los 2.093 millones de dólares (1.840 millones de euros) contabilizados un año antes para tal fin.
Entre enero y marzo, la entidad había provisionado ya 7.027 millones de dólares (6.178 millones de euros), elevando el monto del primer semestre hasta los 14.930 millones de dólares (13.127 millones de euros), un 266% por encima de los 4.073 millones de dólares (3.581 millones de euros) provisionados en la primera mitad de 2019.
De este modo, en el primer semestre del año Citigroup registró un beneficio neto de 3.838 millones de dólares (3.374 millones de euros), un 59,6% por debajo de su resultado del mismo periodo de 2019, mientras que la cifra de negocio del banco estadounidense creció un 8,5%, hasta 40.497 millones de dólares (35.607 millones de euros).
«Si bien el coste de crédito disminuyó nuestros ingresos netos, nuestro desempeño comercial general fue sólido durante el trimestre, y hemos podido capear razonablemente bien la pandemia de Covid-19», declaró el consejero delegado de Citigroup, Michael Corbat, quien destacó el «excepcional trimestre» del negocio institucional, con un aumento del 68% en renta fija.
«Entramos en esta crisis desde una posición de fortaleza», subrayó el banquero, destacando que en el segundo trimestre la entidad fue capaz de incrementar su capital regulatorio, elevando la ratio de capital básico CET1 hasta el 11,5%, cómodamente por encima del nuevo mínimo regulatorio del 10%.
«Con un fuerte énfasis en la gestión de riesgos, estamos preparados para una variedad de escenarios y continuaremos gestionando la entidad con prudencia dada esta situación sin precedentes», concluyó.