La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) considera que los planes de Red Eléctrica (REE) de elevar las inversiones en la red de transporte para el periodo 2021-202 hasta los 6.444 millones de euros, superarían los límites máximos de inversión fijados.
El regulador ha publicado su informe sobre la propuesta inicial de Red Eléctrica, como operador del sistema y gestor de la red de transporte, para el desarrollo de la red de transporte de energía eléctrica para el periodo 2021-2026.
La propuesta incluye la senda de transición energética definida en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), en el cual el sistema eléctrico presenta un cambio sustancial en 2026 respecto a la situación actual.
Además, REE incluye un gran número de actuaciones de carácter singular, cuyas previsiones de inversión se podrían incrementar al alza, una vez que se pongan en servicio, dada la dificultad para su valoración inicial, advierte la CNMC.
En el documento, REE incluye esa inversión total de 6.444 millones de euros para el periodo 2021-2026, destacando las relativas a la integración de renovables y restricciones técnicas, a los distintos enlaces entre los sistemas eléctricos nacionales y a la red de partida, una cifra que la CNMC estima que supone un incremento de la retribución del transporte, desde el ejercicio 2021 hasta el 2026, de casi el 45%.
Así, la retribución del transporte del último ejercicio del periodo, año 2026, tendría un incremento algo superior a 700 millones de euros, señala el regulador.
De esta manera, en términos anuales, el ‘superregulador’ estima que la inversión total anualizada para el periodo 2021-2026, sujeta a limitación, alcanzaría los casi 989 millones de euros al año, a los que habría que añadir cerca de 759 millones de euros correspondientes a las interconexiones con estados miembros de la Unión Europa -interconexión de España- Francia por el Golfo de Vizcaya (647 millones de euros) e interconexión Norte España-Portugal (112 millones de euros), las cuales no computan dentro de los límites de inversión establecidos- y 41 millones de euros anuales correspondientes a los despachos de telecontrol y sistemas necesarios.
En concreto, el volumen estimado en la propuesta de REE para el periodo 2021-2026 es de 5.684 millones de euros, de los cuales 1.133 millones de euros se corresponden con instalaciones que forman parte de la red de partida y cuya puesta en servicio es posterior al 2020.
De los 4.551 millones de euros restantes, el mayor volumen de inversión se destina a la integración de renovables y resolución derestricciones.
Además, en ese importe hay que incluir una partida de unos 460 millones de euros, ya que algunas de las actuaciones incluidas en la propuesta tienen una fecha de puesta en servicio prevista posterior al 2026.
NIVEL DE INVERSIONES
Así, el regulador considera que este «elevado» nivel de inversiones previsto en la propuesta sobrepasaría el volumen máximo de inversión fijado por el Real Decreto 1047/2013, «con independencia de cómo de optimistas sean las previsiones de PIB que se consideren».
Según la normativa, el valor máximo del volumen anual de inversión en redes eléctricas no podrá superar el 0,065% del PIB de España previsto para el ejercicio.
No obstante, el Real Decreto-ley en materia energética aprobado la pasada semana por el Gobierno ajusta excepcionalmente, ante el impacto por la pandemia del Covid-19, los porcentajes de PIB por los que se rigen estas inversiones máximas, con el objetivo de que se pueda mantener el ritmo inversor previsto originalmente, antes de la crisis, dado la fuerte caída que se estima en la economía.
De todas maneras, la CNMC estima que la propuesta del operador «deberá acompasar los esfuerzos en inversiones a unos límites objetivos, lo más realistas posibles, estableciéndose un orden de prioridad de ejecución claro, detallando, en la medida de lo posible, loscondicionantes de ejecución que puedan ser necesarios para cadainfraestructura de manera secuencial, permitiendo el seguimiento de lapropuesta y su supervisión, una vez que sea aprobada».
EJECUCIONES
En términos de unidades, la propuesta de operador del sistema incluye la repotenciación de 5.448 kilómetros de líneas existentes, la monitorización dinámica de 690 kilómetros de líneas, 2.190 kilómetros de nuevas líneas, 146 kilómetros de cables soterrados y 466 kilómetros de cables submarinos, sin contar con la Interconexión de Golfo de Vizcaya entre Francia y España.
Además, la CNMC, además, incluye en su informe una serie de aspectos que el operador del sistema deberá contemplar en su documento definitivo de planificación. Entre otros, los relacionados con la descripción e identificación de las instalaciones para su retribución; la inclusión de varios escenarios de demanda; los valores de inversión en la interconexión del Golfo de Vizcaya, y en el segundo enlace entre la Península y las Islas Baleares y en el enlace Tenerife-La Gomera, así como una justificación ampliada en los vertidos de producción renovable evitados.