Abertis levanta 900 millones con una colocación de bonos

Abertis ha cerrado con éxito la colocación de una emisión de bonos por importe de 900 millones de euros, el máximo previsto en la operación que partía de 750 millones, y con vencimiento a nueve años, según informaron en fuentes de la compañía.

Se trata de la tercera incursión que la compañía de autopistas realiza en el mercado de capitales en lo que va de año, la segunda desde que estallara la crisis, con la que refuerza el colchón de liquidez de 4.400 millones con que cuenta.

Asimismo, la firma controlada por Atlantia y ACS coloca títulos de deuda días después de cerrar la compra de RCO, una de las mayores concesionarias de autopistas de México, una operación por la que toma una participación de control del 51,3% de la compañía, por un importe de 1.500 millones de euros.

En la emisión de este viernes, Abertis ha colocado así el importe máximo previsto después de recibir peticiones de bonos que multiplicaban por más de dos la oferta. De esta forma, el cupón se ha fijado en el 2,25%, 25 puntos menos respecto al precio de partida.

BNP Paribas, Santander, Société Générale, UniCredit han actuado como colocadores de la operación, en la que también han participado Banca IMI, BBVA, CaixaBank, ING, JP Morgan, Mizuho y Natixis, según informa ‘Bloomberg’.

La emisión sucede a la realizada a finales de abril, en ese caso de 600 millones de euros y a través de HIT, sociedad vehículo a través de la que controla el 100% de la empresa de autopistas francesa Sanef.

Asimismo, el pasado mes de enero colocó otros 600 millones de forma directa, a través de la matriz, poco después de que al inicio del ejercicio Abertis elevara hasta 12.000 millones de euros el volumen máximo de su programa de emisión de títulos de deuda, desde los 7.000 millones en que estaba fijado.

La emisión, al igual que la inmediatamente anterior, también se lanza después de que Standard & Poors (S&P) avisara a la firma de una eventual pérdida de ‘investment grade’, revisión que vinculó a la evolución de la crisis y su impacto en el tráfico de la compañía, especialmente en la relación entre la generación de caja de su negocio y su deuda.

No obstante, el grupo confía en conservar esta calificación. Según aseguró con ocasión de la compra de RCO, la operación se ha financiado con efectivo disponible y préstamos a medio y largo plazo ya existentes. Además, considera que las agencias de rating ya tenían descontada la transacción.