Planas defiende la aportación de agricultores y ganaderos en la sociedad

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha defendido que la crisis sanitaria desencadenada por el coronavirus «ha demostrado el gran servicio que agricultores y ganaderos hacen a la sociedad», al garantizar el suministro de alimentos sanos «en cantidad y calidad suficientes».

Así lo ha trasladado el ministro durante la celebración del webinar ‘Vuelta a lo Rural’, celebrado en el marco de la iniciativa ‘Agrifood beats coronavirus’, organizado por la Fundación Europea para la Innovación y la Aplicación de la Tecnología para fortalecer el papel del sector primario y la industria agroalimentaria frente al Covid-19.

El ministro considera oportuno aprovechar esta vuelta a los valores rurales para impulsar un desarrollo fuerte y sostenible, más equilibrado entre lo rural y lo urbano, que garantice su supervivencia. «Un país que quiere ser soberano debe ser capaz de alimentarse», ha añadido.

Por otra parte, ha defendido que el sector agrario necesita las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) y ha reivindicado el valor de esta política para el conjunto de la sociedad, destacando «el firme compromiso del Gobierno con este objetivo y una transición justa, que no deje a nadie atrás y en la que se apueste por una agricultura y ganadería sostenible y rentable, como motor económico de los pueblos.

También ha recordado que la Comisión Europea ha presentado recientemente sus estrategias ‘De la granja a la mesa’ y de ‘Biodiversidad 2030’, en el marco del Nuevo Pacto Verde. «España está alineada con estos objetivos medioambientales más ambiciosos, pero entiende que es necesario contar con un presupuesto suficiente», ha matizado.

El ministro también ha señalado que este miércoles se han presentado las perspectivas financieras europeas revisadas que responden a muchas peticiones de España y que las negociaciones para la futura PAC «van en la buena dirección».

En este sentido, ha insistido en que «la pervivencia de un medio rural activo pasa por la rentabilidad de las explotaciones agrícolas y ganaderas» que precisan de las ayudas comunitarias, así como de una remuneración justa y una cadena alimentaria equilibrada.

El futuro del medio rural pasa por lo que el ministro denomina «triángulo mágico»: contribuir al relevo generacional, fomentar un regadío más eficiente y digitalizar los territorios.

Para lograr estos objetivos, la PAC, con una dotación presupuestaria suficiente para hacer frente a los nuevos retos sociales y medioambientales que se avecinan, se erige como una política fundamental.