Seis semanas. Son las que está vigente el estado de alarma decretado por el Gobierno. Locales cerrados que imposibilitan los ingresos de quienes estaban en régimen de alquiler en los centros comerciales. Por eso, la avalancha de peticiones de condonaciones de renta y gastos ha sido masiva por parte del sector retail.
La compañía de property management MVGM destaca que las solicitudes de bonificación o condonación de la renta superan el 60%. Es decir, que dos de cada tres inquilinos de centros comerciales han pedido a la propiedad alguna medida que alivie su carga en estos momentos de incertidumbre. “Los propietarios están contestando de manera mayoritaria ofreciendo moratorias en los pagos de la renta. Pero nos encontramos con un porcentaje muy elevado de devoluciones, incluso en operadores que no han solicitado nada”, matizan desde MVGM.
Dos de cada tres inquilinos han pedido a la propiedad alguna medida que alivie su carga en estos momentos de incertidumbre
La deuda se sigue incrementando. Y es que la moratoria aprobada por el Gobierno no es de amplia aplicación. En otras ocasiones, aterriza cuando ya se ha llegado a un acuerdo entre propietarios y arrendatarios de centros comerciales. “El retraso en el pago no alivia la situación económica de los inquilinos que, ante la posibilidad de que no se les conceda una bonificación total o suspensión en el alquiler en la situación actual, optan por devolver la domiciliación bancaria. En algunos casos, no sólo la de abril y marzo. Inclusive la de febrero”, apuntan desde MVGM.
FUERZA MAYOR EN LOS CENTROS COMERCIALES
Poniendo como ejemplo su propio portfolio, la deuda en los centros comerciales de MVGM ha aumentado más de un 20% en abril respecto al primer trimestre de 2020. La justificación que utilizan los inquilinos para devolver la domiciliación es la fuerza mayor.
“En el caso del pago del alquiler y de las cargas por transferencia bancaria, muchos arrendatarios no pagaron el alquiler (y los gastos en muchos casos) en abril para compensar la mitad del mes de marzo”, indican desde MVGM. Y matizan: “Además han avisado con hacer lo mismo en mayo y mientras dure el estado de alarma que no les permita abrir sus establecimientos, en los casos en los que no hayan llegado a algún acuerdo con sus propiedades”.
Eso no significa que, una vez el estado de alarma quede guardado en el baúl de los recuerdos, las aguas vuelvan a su cauce en los centros comerciales. Según MVGM, las negociaciones actuales van todavía más allá. Porque, aunque se permita la apertura, los ingresos no serán los mismos que antes de la aparición de la pandemia. Habrá que ver cuál será la actitud de los clientes, las medidas de distanciamiento, y el control de los aforos.
FINALES DE AÑO
“Las solicitudes de bonificaciones del sector retail se extenderán en el tiempo. En muchos casos llegaran, incluso, a final de año. Otros solicitarán renta variable pura, hasta que las tasas de esfuerzo vuelvan a la normalidad”, concluyen en MVGM. Mientras tanto, los operadores seguirán sin pagar las rentas en los centros comerciales. Y, en muchos casos, las cargas.
Los operadores de retail prevén que sus ventas sigan disminuyendo tras la apertura. Por ejemplo, el sector textil español estima una caída de la facturación de hasta el 37% durante 2020, según Fashion Network. El Corte Ingles, Mango, Decathlon, H&M o Media Markt, al igual que los grupos de restauración y ocio, han presentado ERTEs.
Hay que tener en cuenta que, por lo que respecta a la actividad de los centros comerciales, sólo permanecen abiertos aquellos establecimientos que ofrecen productos y servicios de primera necesidad. La ocupación de locales en centros comerciales permanece inalterable. Y los presentes aprovechan para hacer trabajos de limpieza o inventario. Otros utilizan el local para preparar sus envíos online. La afluencia a este tipo de espacios ha descendido un 93% en abril respecto al mismo mes del pasado año.