Quizá nunca te has fijado que muchos de los productos que metemos en la nevera están a temperatura ambiente en los supermercados. Por algo será. Y es que tendemos a guardar casi todo en el frigorífico sin saber que muchos alimentos naturales o procesados no necesitan el frío, ni siquiera en verano. De hecho para muchos de ellos es contraproducente porque se estropearán antes o perderán valores vitales como sabor o nutrientes.
La lista es más larga de lo que podemos creer y algunos casos como conservas, aceites, patatas o especias son obvios. Vamos a centrarnos en cinco alimentos que un alto porcentaje de la población conserva en la nevera, al menos una vez abierto, y que no sólo no es necesario sino que es perjudicial.
1Huevos

Sólo los huevos que han sido lavados con agua deben conservarse en la nevera. Si sólo les hemos limpiado pueden estar a temperatura ambiente. En España y Europa, al contrario de otros países como Estados Unidos donde se lavan para eliminar contaminantes y luego se enfrían, no es necesario el lavado, evitando así que la la humedad o condensación estimule un crecimiento bacteriano que podría ingresar en el huevo a través de los poros.