Leroy Merlin presentará la próxima semana un Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) que afectará a 11.000 trabajadores, quedando excluidos el equipos de mandos, aunque complementará la prestación pública de desempleo.
Según ha informado la sección de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT, la aplicación de estos despidos temporales tendrán efecto retroactivo al 14 de marzo y se alargará hasta el 11 de abril o hasta que concluya el estado de alarma.
La empresa justifica su decisión por la situación «excepcional» que ha provocado la crisis de emergencia sanitaria derivada del coronavirus Covid-19, lo que ha supuesto las medidas de confinamiento de la población, con su consecuente cierre de establecimientos.
El objetivo de la negociación entre empresa y sindicatos ha sido el de ajustar «al máximo» el número de personas afectadas, de modo que se pueda mantener la viabilidad de la empresa en este escenario «tan impredecible», garantizando, a su vez, el mantenimiento de los empleos.
La excepción del equipo de mandos se ha hecho con el objetivo de atender la actividad de venta de aquellos bienes que pudieran ser esenciales para clientes profesionales, así como la venta ‘online’ y telefónica al público general, con las garantías necesarias de prevención de riesgos laborales.
La dirección de Leroy Merlin ha trasladado su compromiso de complementar la prestación por desempleo a la que se pueden acoger los trabajadores de los contratos suspendidos por fuerza mayor hasta alcanzar el 100% de las retribuciones mensuales fijas hasta el 31 de marzo y el 30% del salario desde el 1 hasta el 11 de abril.
La empresa comunicará la próxima semana a la autoridad laboral el ERTE, que deberá resolver en un plazo de cinco días la fuerza mayor alegada. Asimismo, la compaña pondrá en conocimiento del comité intercentros toda la información del proceso.