La Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la capital se anticipaban al Gobierno de España y activaban, hace ahora una semana, el Plan Territorial de Protección Civil (PLATERCAM). El objetivo era dar respuesta de manera coordinada y eficiente a la crisis del coronavirus tanto en materia de seguridad como de protección civil. No se contaba entonces con los bomberos forestales laborales públicos, cuando en otras regiones como Galicia, el personal de extinción de incendios forestales ya está colaborando para que se respete el confinamiento en áreas rurales.
Al no ser requeridos y con el ánimo de arrimar el hombro en la actual emergencia sanitaria, este colectivo, ahora en desempleo, solicitaba a la Dirección General de Emergencias (DGE) que se les activase «para reforzar a los medios humanos de la DGE» y para » un mejor reparto del trabajo, así como aliviar posibles bajas». La negativa por parte de la Jefatura del Cuerpo de Bomberos no tardaba en llegar.
«No estamos pidiendo que se nos contrate» ha asegurado a MERCA2 uno de los efectivos del personal laboral público de incendios forestales de la Comunidad de Madrid (Infoma), «queremos ayudar, y tenemos experiencia, formación y capacidad profesional» apostillaba.
En cuanto al escrito remitido este jueves a la DGE en el que se solicitaba a la Consejería de Justicia que «active a este personal para asignarlo a cuantas actividades sean necesarias en este escenario de emergencia sanitaria nacional», los bomberos forestales apelaban a la administración autonómica recordando que «durante décadas ha confiado en nuestra capacidad para situaciones de emergencia de incendios forestales y ahora estamos preparados para aportar como personal de la DGE nuestro esfuerzo, dedicación y compromiso con los ciudadanos en las funciones que se requieran«.
La respuesta de la Jefatura de Bomberos agradece, en todo momento, el ofrecimiento, pero incide en que «las necesidades a día de hoy son principalmente de falta de material y de apoyo intrahospitalario». Por otro lado, el texto recoge también una explicación de la estrategia que siguen los bomberos de la Comunidad de Madrid «para hacer frente» a lo que viene, que consiste en «reducir personal en los parques para aumentar la seguridad del mismo -del que se queda en su casa y del que va a la guardia- y para reservarnos al personal que seguro necesitaremos más adelante.
Asismimo, reza el escrito de respuesta al personal forestal, «trasladaros que hay gran cantidad de voluntarios dispuestos a atender y apoyar la crisis sanitaria que nos asola. Tenemos 3000 personas de las agrupaciones y casi 400 del CBCM (Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid).»
Los bomberos forestales -fijos discontinuos- de la Comunidad de Madrid se sienten rechazados por la Dirección General de Emergencias de la que dependen. «Estamos en casa y sentimos que podríamos ayudar estando activos», asegura un portavoz del colectivo. Y aunque los desencuentros con la Administración regional vienen de lejos, en una emergencia sanitaria global como la actual «nos olvidamos de cualquier reivindicación laboral, sólo queremos ayudar», asegura el mismo interlocutor.
Estos bomberos forestales han encontrado en la oposición en la Asamblea de Madrid un apoyo a su ofrecimiento.
VIGILANCIA, DESINFECCIÓN Y TRANSPORTE, EN GALICIA
En Galicia, el personal del servicio de extinción de incendios forestales colaborará en las tareas de contención del coronavirus a través de labores de vigilancia en zonas rurales, caminos y pistas con el objetivo de que se respete el confinamiento.
También ejercerán funciones de asistencia a personas que viven en lugares de difícil acceso para acercarles víveres y material sanitario, además de colaborar en la desinfección de áreas, según fuentes de la Consellería de Medio Rural consultadas por Europa Press, que aclaran que este personal no tendrá capacidad para sancionar a las personas que sean descubiertas incumpliendo las medidas de confinamiento de la población.
De esta medida ha informado el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, este jueves tras la reunión del Centro de Coordinación Operativa (Cecop), que ha acordado el incremento de los efectivos que ejercen las labores de contención y asistencia ante la crisis del coronavirus.
«Evidentemente, la función principal y prioritaria de estos profesionales seguirá siendo la lucha contra el fuego, pero dado el momento en el que nos encontramos, podrán también colaborar en funciones como la vigilancia de zonas del rural, caminos y pistas para garantizar que se cumple el confinamiento; y auxiliar a personas que viven en lugares de difícil acceso y hacerles llegar víveres o material sanitario», ha señalado Núñez Feijóo en la comparecencia telemática desde la sede de la Axencia Galega de Emerxencias, en A Estrada.