¿Pintar las uñas? Olvídate durante la crisis del coronavirus

Todos (o la mayoría de los españoles) estamos concienciados de la importancia de la higiene de las manos, y cualquier otra parte del cuerpo en contacto con otras personas o superficies con gran trasiego de personas. Sin embargo, ¿qué pasa con las manicuras? Resulta que no debes pintar las uñas. Y te explicamos el por qué.

Después del revuelo ocasionado por la permisión de apertura a las peluquerías, muchas de las cuales también hacen trabajos de manicura, los profesionales de estas peluquerías han mostrado en público su preocupación y su miedo por tener que atender a cualquier persona sin la distancia mínima de seguridad. Por ejemplo, para cortar o arreglar las uñas a personas mayores que igual que no pueden lavarse solas la cabeza, tampoco llegan a cortarse las uñas.

Sin embargo, los especialista en salud pública advierten del peligro que entraña el simple acto de pintarse la uñas mientras el peligro de contagio por coronavirus existe. Te mostramos el por qué.

EL MOTIVO POR EL QUE DEBES OLVIDARTE DE PINTAR LAS UÑAS DURANTE LA EMERGENCIA SANITARIA

La pandemia del coronavirus nos ha enseñado que una adecuada higiene en las manos es clave para evitar el contagio. Y es que este virus se propaga muy rápido tanto en las gotas del aire como en el contacto con las uñas, bajo las cuales pueden quedar bacterias sin que nos demos cuenta.

Los dermatólogos explican que los esmaltes actuales utilizan compuestos que al quebrarse o saltarse por el uso, liberan partículas que pueden acumularse en gritas, y debajo de la propia uña.

Y es que la parte inferior de nuestras uñas puede convertirse en un foco de bacterias si no se cumplen las recomendaciones sanitarias. No es sufienciente con lavarse las palmas y el exterior de las manos, también es importante eliminar cualquier resto o suciedad entre la piel y la uña, pues la canícula puede ser un escondite para virus y bacterias.

Esto no significa que no puedas llevar las uñas largas, o que no puedas aplicar el endurecedor, ni mucho menos. Solo que tienes que tener especial atención si la uña sobrepasa la línea del dedo, desinfectando adecuadamente la zona.

NI SE TE OCURRA MORDERTE LA UÑAS

Ahora bien, una de las alertas que han emitido los dermatólogos y sanitarios tiene que ver con la onicofagia, esto es, con el moderse las uñas.

Las personas que sufren esta enfermedad sienten el estrés con más intensidad, y por consiguiente, se incurre en una mayor sensación de nervios y ganas de morder las uñas.

Este simple acto incrementa las posibilidades de contagio si se es portador del virus, además de dar opción a inflamaciones en las cutículas o provocar heridas que se infecten o sean una vía de penetración de otras infecciones.