Se llama tasa rosa y es el sobrecoste que se paga sobre los productos femeninos frente a sus equivalentes masculinos. La única diferencia es que son rosas y están destinados a las mujeres. Supermercados como Mercadona, Lidl, Día, o Carrefour utilizan ciertas técnicas para hacernos pagar más a las mujeres.
Su existencia es un hecho probado, e incluso reconocido por las marcas, cuyos responsables de marketing lo justifican.
Dicen que se debe al sobrecoste que supone en materia de publicidad y packaging la presentación de los productos femeninos para venderse mejor. Y lo bonito nos cuesta muy caro.
6¿Cómo disimulan
Mercadona, Lidl, Día y Carrefour esta tasa rosa?

Para que no se note el sobreprecio de los productos femeninos, los supermercados suelen emplear estrategias. Por ejemplo, colocan los productos masculinos y femeninos en diferentes líneas del supermercado.
Así se lo ponen más difícil a los clientes para que puedan comparar precios. Sino, muchas mujeres se llevarían el producto equivalente masculino para no pagar de más.
De esta manera, no es fácil percibir la tasa rosa o este “impuesto” extra que pagamos las mujeres. Al estar en pasillos diferentes, cuando el cliente vea el precio del desodorante femenino no se acordará de cuánto costaba el mismo desodorante para hombres.