Los artículos de lujo nos encantan. Es un hecho que la excelencia es una cosa que se disfruta como nunca. Por este motivo, es realmente fácil encontrar artículos a la altura del mayor sibarita en cualquier gran almacén. El Corte Inglés es un claro ejemplo de ello. Pero, ¿hay artículos de este tipo para nuestras mascotas? Si tienes una cuenta bancaria realmente abultada y quieres a tu perro como nunca, estos artículos de lujo te van a enamorar.
Sí, la verdad es que la mayoría de artículos de lujo para tu perro que verás en este recopilatorio, son verdaderas excentricidades. Productos a la altura de muy pocos bolsillos donde la opulencia es la máxima expresión. Pero, oye, que la vida son dos días, por lo que si quieres que tu pequeño peludo viva como un verdadero sibarita, estás en tu pleno derecho.
Una tiara de 4.5 millones de euros: el artículo de lujo ideal para tu perro
Hay gente a la que le encanta el lujo más que otra cosa en este mundo. Y sí, hay muchos millonarios excéntricos sueltos que quieren ganar fama a costa de las ingentes cantidades de dinero que gastan en sus mascotas. Asia es uno de esos países donde los ricos son extremadamente excéntricos. Y Riwin Jirapolsek es un claro ejemplo de ello.
Hablamos de un diseñador de gran fama mundial, cuyas joyas se venden a precios desorbitados. Y, no se le ocurrió mejor idea que crear una impresionante tiara con esmeraldas y diamantes de 250 kilates, con incrustaciones de titanio y un precio que marea: supera los cuatro millones de euros. ¿El objetivo? Que su querida bichón maltés Kanune pudiera ir como una princesa mientras recorre alegremente la mansión a las afueras de la capital de este diseñador tailandés. Igual es un poco exagerado, por lo que mejor centrarnos en artículos de lujo para tu perro un poco más mundanos.
Eso sí, este bolso de lujo de Louis Vuitton es un nuevo ejemplo de que tu perro puede vivir como un sibarita. O, en este caso viajar. Hablamos de una bolsa de viaje, perfectamente adaptado para cumplir con los estándares de seguridad aéreo. Sí, con esta bolsa podrás viajar con tu pequeña mascota en avión, siempre y cuando no exceda los 8 kilogramos de peso.
Como no podía ser de otra manera en un producto de la firma de moda francesa, este bolso para mascotas de Louis Vuitton cuenta con las mejores calidades, por lo que tu perro viajará como un verdadero rey. ¿Su precio? 2.000 euros de nada… Aunque, no te gustaría que tu mascota pase frío, ¿verdad?
Otra de las firmas de lujo que no deja de lado a tu amigo peludo, es Swarovski. Y es que, su gama de productos para mascotas incluyen una variada colección de collares, lazos y moños. Aunque la palma se la lleva Diamond Dogs, una firma especializada en productos para perros, que cuenta con diseños creados por Hugo Boss para que tu perro vista como un verdadero sibarita. Hablamos de collares que cuestan 100 euros, abrigos recubiertos de terciopelo con cristales para perros pequeños por 200 euros, o un bolso fabricado en cuero italiano para viajar con tu mascota que solo cuesta 790 euros. Una ganga comparado al de Louis Vuitton.
Pero, seamos claros: tu perro no quiere ninguno de eso artículos de lujo. Le da igual viajar en un bolso de cuero italiano que en una bola de nylon, siempre que pueda estar a tu lado. Tampoco le va a importar llevar más o menos pedrerías en los vestidos que le pones. Realmente le encantaría no tener que ponerse absolutamente nada.
Lo que a tu amigo de cuatro patas sí que le vuelve loco, es dormir junto a ti. Sí, le da igual que sea en una alfombra vieja o en un felpudo que han convertido en una improvisada cama. Pero, si le ofreces una solución mullida y agradable, lo agradecerá como nunca.
Y, aquí es donde entra Superfine Garda Lux Mos, un sofá para perros diseñado por artesanos y creado por Paolo de Anna. Cuenta con un mosaico de piedras de color negro Opus Romano de Bisazza y se apoya sobre unas patas de madera de olivo. Le pones un cojín bien grande para que esté a gusto como nunca, y las siestas que se pegará tu perro en este sofá de lujo harán que viva como un verdadero sibarita. Eso sí, los 2.000 euros que vale la pieza son a tener en cuenta, ¿o no?