La petrolera estadounidense ExxonMobil registró un beneficio neto atribuido de 14.340 millones de dólares (12.975 millones de euros) en el conjunto de 2019, lo que equivale a un descenso del 31% en comparación con las ganancias obtenidas el año anterior, según ha informado este viernes la empresa.
La facturación de la firma en los 12 meses se contrajo un 8,7%, hasta alcanzar los 264.938 millones de dólares (239.689 millones de euros). De su lado, los gastos de la empresa durante el año fueron de 244.882 millones de dólares (221.544 millones de euros), un 5,5% menos.
La empresa ha explicado que la caída en las ganancias y en la facturación se justifica por un descenso de los precios del crudo y sus derivados, así como por un incremento de la inversión en capital, aunque ha sido compensado de forma parcial por los tipos de cambio favorables y por un crecimiento «no convencional» en ciertos productos.
«Nuestras operaciones rindieron bien, pese a que la oferta a corto plazo en los negocios de ‘downstream’ y químicos impactaron los márgenes y los resultados financieros», ha indicado el presidente y consejero delegado de la empresa, Darren Woods.
Entre octubre y diciembre, el beneficio neto atribuido de Exxon fue de 5.690 millones de dólares (5.147 millones de euros), un 5,2% menos que en el cuarto trimestre de 2018, tras un descenso del 6,6% de los ingresos, hasta 67.173 millones de dólares (60.771 millones de euros).