Unicaja se atasca en la era digital y renueva sus planes

El discurso de Unicaja se vuelve a repetir. Hace 3 años, el banco puso en marcha su Plan Estratégico 2017-2020 que, por primera vez, incluía iniciativas sobre digitalización. Pero no ha sido suficiente. El consejero delegado de la entidad, Ángel Rodríguez presumió durante la presentación de resultados anuales de que el banco ha superado los objetivos de 2020, un año antes. “Ha sido más rápido de lo previsto”.

Pero a la hora de presentar su nuevo Plan Estratégico (2020-2022) basado en 5 ejes, su punto fuerte era de nuevo el tecnológico. Rodríguez destacaba que en el negocio bancario “se ha reducido el face to face” con el cliente y quieren hacerlo de otra forma. En un año han conseguido elevar la cifra de clientes digitales en un 17% pasando del 48% de 2018, al 65% actual. Algo “difícil” teniendo en cuenta que están en zonas rurales.

Por ello, sus nuevos planes pasan por cerrar en tres años 100 oficinas, pasando de poco más de 500 a 400 y de paso, las que permanezcan hacerlas más grandes. También tratarán de mejorar la productividad de las oficinas y aumentar el número de agentes financieros para que no haya exclusión financiera en zonas rurales.

Paralelamente, Unicaja quiere bajar la carga administrativa e incrementar el número de operaciones móvil. “Que sean el 50% de las operaciones totales”.  

NUEVO OBJETIVO: EL DATO

El CEO cree que los bancos han gastado mucho dinero en los sistemas de información pero ahora es el momento de gastarlo en el dato “la materia prima del mundo financiero”. Porque conocer al cliente y todo lo relacionado con el “es la forma de relacionarse hoy con él”.

Por ello invertirán 190 millones en esta transformación digital y tecnológica que implica personas y donde tienen pensado incorporar hasta 100 que puedan dedicarse a esto. “Hay mucho toreo de salón en un entorno complicado. Hay que tener nuevos perfiles tecnológicos y comerciales, implicará formación”.

“Cada vez tiene menos sentido la oficina, pero si son necesarias las personas”, por eso a la hora de decidir que 100 oficinas van a cerrar lo primero que van a revisar es “si son rentables”. Y si tomando medidas pueden reducir esta cifra, algo que irán analizando durante estos 3 años. Pese a todo, la política del banco es no hacer un ERE, en todo caso pre jubilaciones o salidas voluntarias.

Su objetivo es “vender más productos y vincular más a los clientes”. Además de potenciar las zonas donde el número de clientes es más bajo y elevar el número de nóminas. Según sus datos, siguen ganando cuota de clientes en las zonas donde operan, pero “hay algo importante” y es que en todas las entidades los clientes cada vez quieren menos cuentas posibles.

CONSUELO

Según destacó el consejero delegado durante su intervención “la vocación del nuevo Plan es mejorar la remuneración del accionista e incluye la recompra de acciones” aunque no dio más detalles.

Su salida a Bolsa (en 2017) fue en un contexto “difícil” y “es destacable” que hayan multiplicado la retribución al accionista. A su modo de ver, el valor está cotizando a niveles de libros bajos y acorde con la rentabilidad y el perfil de riesgo que tiene.

Desde su debut bursátil caen un 12% y no les deja “contentos” pero comparado con otros bancos del Ibex o Europa están “mejor”. La culpa es de los tipos de interés y la evolución de la economía. Pero “no puedo convencer a Lagarde de cómo tiene actual el BCE” justificaba.

NO HAY FUSIÓN

Respecto a una posible fusión con otro banco (tras el intento fallido con Liberbank), desde Unicaja confirmaron que no hay ningún contacto con ninguna entidad y no se ven presionados por los reguladores para realizar ninguna operación.

Sin embargo, siguen abiertos a analizar cualquier oportunidad que genere valor para el accionista. En ese caso, les daría igual ser absorbidos o estudiar una buena oferta. Pero de momento “no hay contacto, ni está dentro del Plan”.