El transporte urbano de Madrid se cuela entre las tres opciones más baratas de toda Europa, así lo ha dicho Omio, la aplicación de viajes. La plataforma líder en reservas de viajes en tren, autobús y avión ha otorgado el primer puesto de su clasificación a Varsovia seguido de cerca por Budapest.
Sin embargo, la capital española no ha conseguido entrar en el top 10. Ocupa la posición 12ª, como una de las 30 ciudades europeas que presentan el mejor servicio de movilidad urbana, según la app berlinesa. Barcelona también se ha quedado a las puertas (13ª), mientras que Valencia ha terminado bastante lejos de las primeras posiciones (18ª).
A pesar de la ristra de problemas que arrastra la red de comunicación de transporte público de la Comunidad de Madrid, tanto la calidad del servicio, aunque haya bajado en estos últimos años, como su precio siempre han sido todo un ejemplo en el Viejo Continente.
En 2020 y por octavo año consecutivo, el importe del billete para viajar en Metro, autobús urbano o interurbano y en Cercanías se ha mantenido intacto. Incluso, el abono de la tercera edad costará menos ya que se desde el 1 de enero se inició una bajada progresiva del 25% para que a final de la legislatura (2023) sea totalmente gratuito, como ya señaló la presidenta, Isabel Díaz Ayuso.
No solo Metro ha presentado una mejoría de sus prestaciones. Desde el 2016, la Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT) ha llevado a cabo la renovación del 60% de su flota con la adquisición de 1.222 nuevos autobuses. Entre 2019-2020 está prevista la compra de 525 autobuses más por un gasto de 173,6 millones de euro. La operación, que ha conllevado una inversión de 390 millones, pondrá su fin este curso.
BICIMAD QUIERE HACERSE SU HUECO EN EL TRANSPORTE
Por otro lado, el dato de suscripciones de BiciMAD, el sistema de alquiler público de bicicletas eléctricas, recogido en 2018 fue el mejor desde su puesta en marcha. En concreto, este nuevo medio creció un 27% y pasó de los 2.813.000 usos en 2016 a los 3.574.000 en ese mismo año. Además, en 2019, entre los días 3 y 10 de octubre, se anotó el record de su funcionamiento con 17.000 usos al día.
Para este año se espera que se inauguren 50 estaciones, ampliando sus fronteras hasta a los distritos exteriores a la M-30, según anunció el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante (PP).
ZURICH, BERLÍN Y VIENA SE HACEN CON EL PÓDIUM
Zurich ha sido la gran vencedora. La capital suiza es quien ha obtenido la mayor puntuación del índice gracias a la extensa red de opciones que ofrecen sus tranvías, trenes y autobuses, conectando toda la ciudad. No obstante, en cuanto a calidad-precio se refiere no ha salido muy bien parada. Comparándose con Bratislava, la mejor relación de ambos indicadores, el billete es cuatro veces más caro para distancias similares.
Berlín, que ha ocupado el segundo escalón del podio, ha sido catalogada como la metrópoli con la oferta más asequible y diversa. Parte de ello se debe al objetivo del alcalde berlinés, que quiere reducir el precio del transporte público a un euro al día. De esta manera, el precio del abono transporte se reduciría en 396 euros, actualmente vale 761 euros, y pasaría a costar 365 euros.
La decisión seguiría la hoja de ruta que tomó Viena en 2013, que fue la primera cuidad que impuso la medida. Puede que haya sido uno de los motivos por los que ha conseguido tercer puesto del pódium de Omio. Desde su implementación, las cifras han sido muy positivas pues el número de abonos anuales vendidos el año pasado superó los 822.000 billetes. Además, el número de pasajeros que viaja en transporte público en Viena ha aumentado de 875 millones en 2012 a 961 millones en 2017.