El relevo en el lobby hotelero mete presión al Gobierno ante la crisis en Canarias

Este miércoles se vivirá un cambio importante en el seno de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat). Juan Molas deja la presidencia tras doce años en el cargo y será sustituido por el presidente de la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Santa Cruz de Tenerife (Ashotel), Jorge Marichal. Un cambio necesario para liderar la solución a la crisis turística en Canarias y presionar al Gobierno.

El relevo no es casual. Tampoco lo es que Marichal sea el único candidato para el cargo. Curiosamente, el origen de predecesor y sucesor en el cargo es muy significativo. Molas es catalán, mientras que Marichal es canario. Ambas comunidades son una gran fuente de ingresos turísticos en España, pero también tienen o han tenido que atravesar momentos delicados. En el caso de Cataluña, los atentados y la situación política repercutieron en los datos turísticos. Desde Cehat, Molas luchó para que el desastre no fuera mayor. La planta hotelera de la región resistió.

En cuanto a Canarias, el Brexit, el cierre de bases de Ryanair, la quiebra de Thomas Cook o la recuperación de otros destinos están siendo un grave problema que sume al archipiélago en una de sus mayores crisis turísticas vividas. Por ello, nadie mejor que un canario que lleva casi 12 años liderando Ashotel para presionar al Gobierno y lidiar con esta crisis.

Al igual que Juan Molas con su lucha contra el concurso del Imserso, se espera de Marichal que sea políticamente intenso y presione al Ejecutivo español. De hecho, como portavoz de la patronal canaria lo ha sido. Incluso en su faceta más periodística también ha dado fe de ello en sus artículos de opinión publicados en Eldiario.es. En ellos, no dudó en cargar contra un miembro de Podemos que criticó la precariedad de las camareras de piso o incluso en criticar la excesiva efusividad del sector turístico tras los mejores años de Fitur.

EL SALVADOR DE CANARIAS

El único candidato para gobernar a los hoteleros es un visionario de la crisis turística en Canarias, ya que desde hace años viene avisando de una realidad: el turismo prestado no es para siempre. Y durante años, Canarias y otros destinos han vivido de ello.

“Debemos ser, empresarios y administraciones públicas, responsables con nuestros recursos e invertir en nuestro destino. No nos echemos en el sofá cómodamente a ver lo bien que nos va y adelantémonos con una estrategia turística de planificación a medio y largo plazo”. Así respondía ante la euforia turística en uno de sus artículos.

Canarias es un destino que, en lo que va de año, ha registrado la llegada de 10,7 millones de turistas internacional (un 4,8% menos que en el mismo periodo del año anterior). Más preocupante fue la cifra en octubre, con una caída del 9,1% y la llegada de 1,1 millones de viajeros, según datos de la Encuesta de Movimientos Turísticos en Fronteras (Frontur) publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

De hecho, el Observatorio de la Industria Hotelera Española, elaborado por Cehat junto a PwC, destaca un descenso de las pernoctaciones de los turistas británicos, como consecuencia de la pérdida de poder adquisitivo que están experimentando debido al efecto Brexit, un segmento fundamental para Canarias.

Estas cifras están afectando a las cadenas hoteleras. Meliá Hotels International logró un beneficio atribuido de 96,8 millones de euros hasta septiembre, lo que supone un 23,7% menos que en el mismo periodo de 2018 debido, en una parte, al mal comportamiento del turismo en Canarias y República Dominicana.

En este escenario, parece tan acertada como necesaria la llegada de Marichal a la patronal hotelera española.