La inclusión de nuevas formas de inversión en el universo de la gestión de patrimonios ha creado un enfrentamiento directo entre los seguidores del formato pasivo contra los que apuestan por el activo. Giorgio Semenzato, CEO de Finizens, lo tiene claro: “La inversión pasiva es más barata, más rentable y menos arriesgada”. El director general de la robo-advisor, que ha sido premiada por el grupo MERCA2 como la mejor de este 2019, se acoge a las estadísticas. La gestión pasiva de activos en Europa, entre 2008 y 2018, ha crecido un 295% frente al 29% experimentado por parte de la inversión activa.
Para el directivo son innumerables las ventajas que presenta esta estrategia. “La gestión pasiva puede resultar hasta 10 veces más barata que la gestión activa”, declaró Semenzato en una entrevista para MERCA2. Y agregó que es una inversión “más diversificada,” por lo que “el riesgo del inversor será menor”.
En opinión del presidente, el cliente español en gestión pasiva es muy homogéneo, pero suelen ser personas informadas con una alta capacidad crítica, decepcionados por las rentabilidades negativas o por haber pagado comisiones demasiadas altas e injustificadas. La gestora delimita su inversión mínima en 10.000 euros, pudiéndose hacer a través de cualquier tipo de dispositivo móvil.
IRRUPCIÓN DE LA GESTIÓN PASIVA AUTOMATIZADA
El uso de la gestión automatizada, que no sufre de las ineficiencias y costes operativos de la tramitación humana, ha provocado que los fondos de inversión pasiva hayan alcanzado comisiones mucho más bajas que el modelo activo y bancario. La retribución media de Finizens se sitúa en el 0,6% anual, mientras que un banco puede estar cobrando entre el 2-3% de media por la gestión de una cartera. Con estos datos, el CEO explicó que las “comisiones más bajas redundan en una rentabilidad más alta para los clientes”.
“Los algoritmos de Finizens no solo se encargan del perfilamiento, diseño y gestión de la cartera, sino que también realizan un rebalanceo automático para mantener el nivel de riesgo del inversor y aumentar la rentabilidad de sus inversiones.”
Las rentabilidades que ofrecen sus carteras dependen del nivel de riesgo de los inversores. Los beneficios de éstas se establecen entre el 20,8%, en la más atrevida, hasta el 8,20%, para la moderada o conservadora. Además, como explicó el cofundador del grupo, atesoran la mayor diversificación del mercado, con más de 19.000 posiciones.
Para que el patrimonio y las inversiones no se vean afectadas por la incertidumbre económica y las fluctuaciones bursátiles, la gestora aconseja protegerlas al máximo. “La estrategia más segura y rentable es aquella que está orientada al largo plazo, mínimo de 7 a 10 años”, aseguró el director general. Para ello, apuestan por la diversificación de los activos, es decir, repartirlos en miles de posiciones distintas para reducir la volatilidad y, por lo tanto, disminuir el riesgo.
APUESTA POR LA TECNOLOGÍA
La compañía ha superado los 7.200 clientes en España, ofreciendo nuevo modelo mucho más disruptivo y adaptado a la nueva demanda del mercado. Uno de los principales objetivos de la marca ha sido ofrecer siempre sus productos bajo una base digitalizada y muy innovadora. La robo-advisor se comprende como una de las compañías líder en la impulsión de las wealthtech, subcategoría de las fintech, como nueva forma de inversión. Por ello, Finizens ha logrado reducir hasta un 85% las comisiones para sus clientes, comparándolo con la media bancaria.
Asimismo, los avances en ingeniería financiera e inteligencia artificial han facilitado a la gestora proporcionar «un servicio con ventajas únicas en el mercado y que supla la demanda actual de los inversores de una dirección transparente, eficiente», subrayó Giorgio Semenzato.