Generar beneficios no esta siendo nada fácil para los brokers que venden CFDs (contratos por diferencia) después de que el regulador financiero europeo, European Securitites Markets Authority (ESMA), se sacara de la manga una regulación, que entró en vigor en agosto de 2018, para proteger a los traders minoristas europeos, que básicamente consistía en prohibir el apalancamiento masivo en estos derivados financieros a los clientes y, sobre todo, en «demonizar» de una manera inexplicable los CFDs.
El Market Maker británico CMC Markets, uno de los gigantes de la industria con una capitalización en mercado de casi 372 millones de libras esterlinas, no ha sido ajeno a los problemas generados por la ESMA y ha tenido que reorganizar sus estrategias de marketing para frenar lo que viene siendo una caída en picado de los ingresos y, lo que es mas preocupante para los accionistas, del Beneficio por Acción (BPA), desde que se conocieran las nuevas regulaciones europeas.
Y es que la caída de ingresos ha sido brutal para el gigante de la industria del brokerage, pasando de 211,24 millones de libras a 166, 01 millones desde marzo de 2018 al mismo periodo del 2019, lo que supone una caída de los ingresos de un 22 por 100.
Su beneficio por acción también ha caído en picado pasando en el mismo periodo de 17,3 peniques a 2 peniques, lo que supone un menos 88,44 por 100 de valor en este ratio que mide cómo de efectivo es el «equity» de la empresa produciendo nuevos retornos para la compañía.
El PER del gigante de los CFDs camina en la misma linea negativa que el resto de ratios. De marzo del año pasado a marzo de 2019 se ha disparado de 9,78 a 41,55, lo que significa que a los accionistas les cuesta más recuperar lo invertido en la compra de sus acciones vía los beneficios que arroja la empresa.
Todo este tusnami provocado el torpedo lanzado por ESMA en la linea de flotación de las empresas que venden CFDs, ha llevado a la compañía a tomar medidas a nivel mundial por parte del CEO de la compañía, el británico Peter Cruddas, consistentes básicamente en reorganizar la cúpula de CMC, lanzamiento de nuevos productos y despidos de empleados masivos en los territorios donde ha caído más las ventas de la compañía.
España ha sido uno de los países afectados por esos despidos masivos y se habla de que se ha prescindido del 50 por 100 de la plantilla en Madrid y algunas fuentes conocedoras del asunto van mas allá e indicaron a Merca2: «Los despidos en España alcanzan al 70 por 100 de la plantilla incluido el anterior director de la oficina de Madrid Carlos Villalibre, que ha sido sustituido por la directora de Marketing Sara Carbonell que ejercerá ahora de responsable absoluta de CMC España. Además, desde Londres se ha amenazado con que si no se remontan las ventas, los despidos en la sede de Serrano 21 pueden llegar hasta el 90 por 100 de la plantilla actual
Los nombramientos en la cúpula mundial también se han producido con la incorporación de Euan Marshall como Director Financiero a partir del 1 de noviembre de 2019 y Matthew Lewis, Director de Asia Pacífico y Canadá de CMC, que también se unió la semana pasada a la Junta directiva.
La estrategia de la compañía pasa ahora por buscar lugares más «friendly» en cuanto a regulación se refiere con los CFDs, como es el caso de Australia, donde la empresa británica ha firmado un acuerdo con el AZN Bank para convertirse en la plataforma que de servicio a los clientes del gigante de la banca Australiano que hacen trading.
Además, las nuevas lineas de actuación pasa por innovar en la creación de nuevos productos, aunque algunos de ellos no hagan más que añadir más confusión a la que ya de por si sufren algunos usuarios de estas plataformas cuando se meten a operar derivados financieros que ni ellos mismos entienden. Es el caso de los nuevos indices que ha lanzado CMC Markets sobre divisas que permiten operar una divisa contra una cesta ponderada del resto de divisas principales mundiales. El argumentarlo de ventas de este producto es que el ponderar una cesta de divisas frena la volatilidad en las caídas de un par, ya que el «performance» de este par ya no depende de una divisa sola sino de un grupo de divisas, que ademas ninguna supera el 40 por 100 en el peso de la cesta.
Con estas medias, el proveedor de CFDs británico pretende dar un salto en las ganancias a finales de año. El presidente ejecutivo mundial de CMC, Peter Cruddas, espera que los ingresos comerciales netos de sus negocios de contratos por diferencia (CFD), que se vieron muy afectados por los cambios en las reglas del año pasado, aumenten en 22 millones de libras a 85 millones hasta el 30 de septiembre de 2019. A nivel España, el sector esta expectante también por ver si Carbonell consigue enderezar el rumbo de CMC España en un entorno tan complicado y evitar que sigan los despidos en las oficinas de Madrid.