La segunda reunión entre sindicatos y Ryanair termina sin acuerdo sobre el ERE y con varios cabos sin atar. El sindicato de tripulantes de cabina de Ryanair USO denuncia que la aerolínea low cost no ha concretado “aun cuándo van a ser efectivos los despidos y a 15 días del final de la negociación no está toda la documentación presentada”.
Desde USO señalan que Ryanair “está dilatando las negociaciones”, que continuarán con la próxima reunión el 7 de noviembre. “Los sindicatos acusan a Ryanair de prácticas fraudulentas al trasladar a algunos trabajadores afectados por el ERE al margen de la negociación, dejando al resto de trabajadores en situación de discriminación”, denuncian.
La aerolínea ha planteado un plan de recolocación para los trabajadores, ofreciendo traslados a bases en países como Polonia (donde se contrata a través de Buzz), a Croacia (donde se contrata a través de Air Malta) o a Reino Unido (donde se contrata a través de Ryanair DAC UK). Así lo avanzó en la pasada reunión la compañía; aunque será el próximo 30 de octubre cuando dé más explicaciones y ofrezca la documentación solicitada por el sindicato USO.
El principal problema de esta mediada es que los trabajadores de Ryanair pierden las condiciones y la legislación española, ya que se cambia de país, además de que no se mantendría tampoco la antigüedad porque sería una novación contractual.
El colectivo sindical denuncia que tampoco se sabe la cifra de vacantes. “USO ha recriminado a la empresa la formación de personal nuevo para bases españolas y el traslado de trabajadores desde bases extranjeras a España sin ofrecer ni una sola plaza para los afectados por el despido colectivo”, explican. Al parecer, las vacantes ofrecidas son públicas para todas las bases inmersas en cierre de toda la red Ryanair, no solo para los afectados en las bases españolas.
El ERE afecta a un total de 432 despidos, de los que 327 son tripulantes de cabina (TCP) y 105, pilotos. Del total, 220 corresponden a tripulantes contratados directamente por Ryanair; 85 a tripulantes contratados por la agencia Workforce, y otros 22 son tripulantes ligados a Crewlink. Todo ellos procedentes de las bases de Girona, Tenerife Sur, Las Palmas de Gran Canaria y Lanzarote, cuyo cierre está previsto para el próximo 8 de enero.