La situación en Venezuela cada vez es más inestable para las compañías aéreas tras el tiroteo en el que se vio involucrada una tripulación de Air Europa el pasado sábado en Caracas. La aerolínea del grupo Globalia ha tomado la decisión de no obligar a sus trabajadores pernoctar en el país, tal y como llevaban meses pidiendo desde el Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla). Aunque la estrategia se queda a medio camino porque la falta de suministro eléctrico y la amenaza de cierre aéreo sigue poniendo en peligro la seguridad de sus trabajadores al seguir operando los vuelos.
La compañía aérea ha asegurado a MERCA2 que van a dejar de pernoctar en Caracas para realizar el vuelo triangular hasta Punta Cana (República Dominicana), igual que ya hacían otras como Iberia, cuya tripulación hace noche en Santo Domingo. No obstante, fuentes de la empresa no han podido confirmar si se trata de una media provisional o definitiva.
Desde hace meses, la tripulación de Air Europa lleva denunciando la situación de inseguridad de su tripulación. Exigían a la compañía no pernoctar en el país, algo a lo que ha accedido tras el suceso ocurrido el pasado sábado, cuando varias motos siguieron hasta el hotel a la furgoneta en la que se trasladaba la tripulación y se viera obligada a entrar rápidamente al hotel al escuchar unos tiros. Finalmente, terminó sin incidentes. Sin embargo, el Sepla va más allá. Ahora exige la suspensión de los vuelos “hasta que las condiciones operacionales sean seguras”.
No obstante, desde Air Europa no han podido confirmar si llevarán a cabo estas medidas. Si bien es cierto, Iberia ha confirmado a MERCA2 que su último vuelo a la capital venezolana se suspendió por la falta de suministro eléctrico. Un problema que también afecta a los vuelos de Air Europa, junto con la amenaza del cierre del espacio aéreo en caso de conflicto armado civil.
De momento, la aerolínea de Globalia sigue operando sus vuelos: tres frecuencias semanales entre Madrid y Caracas. Por su parte, Air France dejó de operar sus vuelos en el país; mientras otras, como Plus Ultra, continúan volando con tres frecuencias semanales y la tripulación pernoctando en el mismo hotel que lo hacía la de Air Europa. Desde la compañía no han confirmado si tomarán medidas para evitar que los trabajadores duerman en Caracas.
¿POSIBILIDAD DE DEJAR DE VOLAR?
Ante la situación de desamparo en la que se encuentran, el colectivo sindical amenaza con tomar medidas conjuntas con otros sindicatos, entre las que no se descarta el plante de las tripulaciones a volar al país. Una acción que según el jefe de la asesoría jurídica del Sepla, Pedro Arriola, contaría con la defensa firme de los sindicatos y con toda seguridad se procedería a revocar por parte de los tribunales que no aceptarían el mantenimiento de una situación “tan excepcional y peligrosa”. De hecho, este martes se reunirá la junta rectora del Sepla, en la que tampoco se descartan acciones conjuntas de varias compañías.
No obstante, los pilotos reclaman la mediación gubernamental para evitar esta situación y forzar de algún modo a la compañía a frenar estas operaciones hasta que no se cuente con un entorno seguro. Así, han solicitado una reunión con el Ministerio de Fomento y de Asuntos Exteriores para que tomen cartas en el asunto.
PLAN DE EMERGENCIA DE AIR EUROPA
No es la primera vez que desde Sepla han intentado que las instituciones tomen partido en este conflicto. Las inspecciones de Trabajo de Madrid y la Dirección General de Trabajo se declararon incompetentes sobre este tema.
Si bien es cierto, una Resolución del Ministerio de Trabajo, mediante escrito fechado el 18 de febrero, dio un “plazo a la compañía para presentar ante la autoridad laboral un plan de contingencia ante posibles emergencias en Caracas, plan de aseguramiento de abastecimiento de alimentos, asistencia médica y suministros médicos en Caracas”.
Plan que la empresa presentó a través de un escrito que remitió a sus trabajadores. En este pedía que tuviesen siempre los teléfonos móviles encendidos y cargados, entre otras medidas. Además, el manual recuerda que la seguridad de los tripulantes en los traslados está garantizada por el hotel mediante escolta de vigilancia privada y la Guardia Nacional Bolivariana. Un documento que no pudo evitar los acontecimientos ocurridos el pasado sábado.
El colectivo sindical calificó este plan de “memorándum a todas luces insuficiente”, sobre todo dada la escalada de violencia que se está sufriendo en todo el país en los últimos días.