Mediaset lleva años protestando porque varios prestigiosos periódicos de papel les afean su supuesta «telebasura» mientras sus versiones digitales combinan respetables artículos con una lluvia de entradas que buscan el clickbait con la munición que ofrecen espacios como ‘Sálvame’ o ‘GH Dúo’.
Las televisiones y las radios tradicionales se han cansado de ser utilizadas por los medios digitales por su evidente tirón y algunos programas se han ensañado con algunas versiones digitales del papel para denunciar la supuesta incoherencia.
Jorge Javier Vázquez, Risto Mejide, Pablo Motos o David Broncano han arremetido en los últimos días contra los portales digitales por el tratamiento que han recibido espacios como ‘Sálvame’, ‘El hormiguero’ o ‘La vida moderna’.
JORGE JAVIER SE PASA DE FRENADA
Jorge Javier denuncia el linchamiento al que le someten algunos digitales. El presentador parece olvidar los polémicos proyectos que le lanzaron a la fama y ha arremetido con dureza contra varios periódicos.
La edición digital de La Vanguardia adelantó que el presentador se había sometido a una lipoescultura y el presentador les ha contestado desde su blog: «Me produce muchísima tristeza la edición digital de La Vanguardia. Es un periódico al que le he tenido muchísimo respeto y cariño».
El diario de Godó, explica el presentador, «no se merece una edición digital tan ramplona, tan basta, tan poco trabajada. Sus directivos deberían tomar cartas en el asunto o contratar a gente más preparada».
ABC Y COPE EN LA DIANA
El conductor de ‘Sálvame’ explica también que respeta a ABC pese a su distancia ideológica con el diario de Vocento porque «gente a la que he admirado y admiro escribe ahí. De ahí que no entienda cómo la edición digital que se dedica a cubrir noticias del mundo de la televisión sea tan barriobajera, mentirosa y tramposa».
El de Badalona dice que nunca «hubiera pensado que un periódico que presume de educación y buenas maneras permita que se publiquen tantas informaciones maliciosas en su edición digital. Sus redactores tendrían cerradas hasta las puertas de ‘Sálvame’ por tendenciosos y pasados de rosca«.
No le gusta a la estrella de Telecinco la versión digital de COPE, que «se pregunta si mi cambio físico se debe al esfuerzo o a las operaciones y se hace eco de un tuit que asegura que en una foto se me nota la lipo que me he hecho. Puro rigor».
OTROS ENFADOS
‘Todo es mentira’ ha nacido para denunciar el clickbait. El programa presentado por Risto Mejide y corpoducido por La Fábrica de la tele (realizadores de ‘Sálvame’), denuncian cada día los trucos de los periódicos digitales para acumular clicks.
Pablo Motos, muy molesto por la etiqueta que sufre de «machista», también aplaudió la semana pasada una sección de Nuria Roca en la que ponía sobre el tapete los excesos digitales sobre supuestos enfados de famosos con el conductor de ‘El hormiguero’ que solo existieron en las mentes más calenturientas.
El humorista Quequé utilizó también la semana pasada el espacio ‘La vida moderna’ de la SER para arremeter contra OK Diario por una ligera incorrección en un artículo sobre Broncano. El programa humorístico también ha cargado en varias ocasiones con dureza contra Periodista Digital, a los que acusan de amarillos.
Y Bertín Osborne esta misma semana ha cargado contra los que «emborronan las páginas digitales» porque varios medios hablaron de la cancelación de ‘Mi casa es la tuya’.
¿CASUALIDAD O CAMPAÑA MEDIÁTICA?
Detrás de esta sucesión de enfados podría encontrarse una campaña de las principales televisiones y radios para desprestigiar a los medios digitales, que están marcando la agenda política con su colección de exclusivas mientras el papel se muere en parte por la inanición de información relevante sobre el poder político y económico.
Es evidente que en todos los sectores mediáticos hay excesos para conseguir clicks, oyentes o televidentes. También es cierto que la televisión, gran generadora de la conversación social de las redes, se ha colocado en una diana que parece convertirla en el único generador de basura.
Pero también parece comprensible que las televisiones ocupan un espacio radioeléctrico público y están sometidas al examen del mundo periodístico, que muestra las costuras catódicas por mucha venganza que ahora intenten articular contra el clickbait.
DERECHO AL PATALEO CONTRA EL CLICKBAIT
Jorge Javier está en su derecho de enfadarse. Pero no estaría de más que admitiese que programas que ha presentado como ‘Aquí hay tomate’ han hecho mucho daño a multitud de personajes con sus tácticas. Pablo Motos también puede cabrearse, aunque está en su obligación cambiar algunas bromas que son interpretadas como excesos machirulos.
Risto, que entró en el mundo televisivo humillando sin piedad a jóvenes que soñaban con ser artistas, tampoco parece la persona idónea para convertirse en adalid de la verdad. Y Broncano no puede evitar que algunos medios critiquen que el Ayuntamiento de Madrid contrate a su hermano y éste a su vez lo contrate a él tras haber mostrado su complicidad en público con Carmena.
Pero los periódicos del papel también deberían tomar nota y saber que es difícilmente conjugable dar lecciones de periodismo en sus páginas de comunicación y utilizar las mismas tácticas para ganar a los nativos digitales.