Siempre se ha dicho que la unión hace la fuerza. Y es cierto que cuando dos empresas se unen, compaginan actividades, comparten herramientas y buscan un fin común los resultados suelen ser, o eso debería, satisfactorios para ambos. Luda Farma ha ideado la manera de que todas las farmacias de España estén conectadas entre sí para terminar con el desabastecimiento.
Esta especie de red farmacéutica, que busca crear un ecosistema de colaboración, ha firmado un acuerdo con el laboratorio Perrigo para llegar a cabo su proyecto. El sistema IIM (Internal Inquirer Manager), consigue la conexión entre las boticas, mediante un robot informático que realiza consultas a tiempo real sobre la disponibilidad del producto.
Su creadores, Daniel Carvajal y Luis Martín Lázaro lanzaron esta startup hace algo más de un año, con la idea de fundar una plataforma tecnológica de farmacéuticos para farmacéuticos. Acaban de firmar un acuerdo con la patronal Adefarma, la Asociación de Farmacéuticos de Madrid y cuenta con la colaboración de FEFE, la Federación Empresarial de Farmacéuticos españoles.
Entre sus múltiples funciones están la de optimizar el precio del pedido o servir como comparador de precios. En la era de los marketplaces, del movimiento rápido, de la funcionalidad y de las tiendas online, con reparto a 24 horas, que abastecen productos al minuto, Luda Farma trata de mirar de frente al mercado y plantar cara a los grandes.
El boticario, con este sistema, podrá cubrir las necesidades de los pacientes y favorecer la venta de los productos. De esta manera, si una farmacia no dispone del medicamento solicitado por el usuario podrá consultar la disponibilidad de ese fármaco en el resto de farmacias más próximas, e indicar al cliente el centro más cercano donde puede adquirir el fármaco que necesita. La propia farmacia podrá reservar el medicamento en la farmacia que acuerde con el cliente y de esa reserva se llevará un 7% la venta.
LABORATORIO PERRIGO
El laboratorio Perrigo cuenta con una treintena de marcas, entre las que destacan XLS medica, Relec, Farmatint o apisérum. Desde el laboratorio señalan, por una parte, la labor de ayuda al farmacéutico que, gracias a esto, será más eficiente con sus clientes y, por otra parte, ensalzar la figura del consumidor, que cada vez es más exigente y que necesita grandes dosis de pragmatismo.
Todas las farmacias pueden tener cabida, las online y las offline, y podrán vender y dispensar los productos en cualquier lugar del territorio nacional con un tiempo máximo de una hora.
El sistema es gratuito para el usuario y busca cerrar un circulo en el que los proveedores confíen en las farmacias para la venta de medicamentos y que, a su vez, el cliente vea que la farmacia es el lugar más rápido donde adquirir el producto. Es un sistema que trata de democratizar un servicio que hace tiempo era muy cerrado.
La nueva economía ha abierto el abanico de la colaboración, y en esto las farmacias han visto la manera de salir beneficiadas.