La semana pasada, la firma británica Zegona anunció una opa parcial sobre la operadora vasca Euskaltel para, previa ampliación de capital, aumentar su participación hasta el 29,9% y convertirse en su primer accionista. Junto a Telefónica y MásMóvil, forman el trío nacional en un sector crítico para la economía española. Pero, ¿qué fondos están detrás? ¿://www.merca2.es/blackrock-ibex-20000-millones-euros/» target=»_blank» rel=»noopener»>omnipresente Blackrock tiene presencia en las tres operadoras españolas. Por un lado, es el tercer mayor accionista de Telefónica (4,86%). Por otro, cuenta con una pequeña participación en Euskaltel (1,84%) y otra casi residual en MásMóvil (0,52%).
Norges Bank, que gestiona el mayor fondo soberano del mundo con las ganancias que obtiene Noruega del petróleo y el gas para garantizar las pensiones, ha invertido parte de su dinero en dos de las tres operadoras españolas. Por un lado, tiene un 1,69% de Telefónica (quinto mayor accionista); por otro lado, cuenta con una participación del 2,73% en Euskaltel. El otro gran fondo internacional, Vanguard, no podía quedarse atrás. Un 2,57% en Telefónica y un 1,43% en Euskaltel representan su posición en las operadoras.
Más allá de estos tres monstruos de la inversión, aparece con fuerza Fidelity Investments en Másmóvil. La gestora con sede en Boston suma en la compañía fundada en 2006 por el empresario austriaco Meinrad Spenger un 13,7% a través de Fidelity Investments Trust (5,64%) y FMR LLC (8,09%).
Los accionistas de Euskaltel tendrán que aceptar o no la opa parcial lanzada por Zegona a un precio de 7,75 euros por acción. El fondo cotizado en Londres, que ya posee un 15% de la operadora vasca, ha mostrado su intención de convertirse en el primer accionista. Esta posición la ocupa en la actualidad Kutxabank (21,32%), aunque si sale adelante esta operación la firma británica pasará a tener un 29,9% de la telco. También destacan en su accionariado los fondos estadounidenses Capital Research (5,27%) y Capital Income Builder (5%).
MÁSMOVIL, FUERTE EN BOLSA
Telefónica es la cuarta empresa del Ibex 35 por capitalización bursátil, solo por detrás de Inditex, Santander e Iberdrola. Con presencia en trece países, un beneficio neto de 3.132 millones de euros en 2017 y más de 5.192 millones de acciones, la compañía presidida por José María Álvarez-Pallete no vive sus mejores días en el selectivo español.
Los títulos de la operadora con sede en Las Tablas (Madrid) registran una caída del 15,39% desde enero (a cierre del 18 de octubre). La cotización de Telefónica dibuja un canal bajista desde marzo de 2017 y, a largo plazo, sus 6,87 euros actuales quedan muy lejos de los máximos de 2015 en el rango de los 15 euros.
MásMóvil llama a las puertas del Ibex 35. Capitaliza más que algunas compañías del principal selectivo español (DIA, Técnicas Reunidas, Indra, Mediaset y Meliá Hotels) y además muestra una subida del 19,68% este año. Si bien, la línea en el Mercado Continuo es lateral, desde la segunda mitad de agosto no ha dejado de aumentar su valor bursátil.
Por último, Euskaltel rebotó más de 10% el viernes tras el anuncio de la opa parcial de Zegona. Abrió la sesión en 6,58 euros y llegó hasta los 7,42 euros, cerca de los 7,75 euros que ofrece el fondo británico por las acciones de la operadora vasca. Hasta ese día, la cotización de la telco naranja mostraba una tendencia descendente desde que presentara resultados del primer semestre. Comenzó el año en 6,79 euros, alcanzó los 8,13 en julio y volvió a caer hasta el nivel de los seis euros.
CONFIANZA FIJA EN EL FIJO
Al margen de que los fondos picoteen en diversos valores, lo cierto es que Telefónica, MásMóvil y Euskaltel pueden presumir en estos momentos de mantener una línea ascendente en la captación de clientes de banda ancha fija. Sobre todo porque se trata del nicho de negocio donde se genera mayor valor añadido en las facturas.
En este sentido, el operador azul se ha mantenido en positivo durante el último año, algo que, en sí mismo, ya es un logro. Lo mismo sucede con la compañía vasca, que tras la integración de las otras “cableras del Norte”, R y Telecable, ha conseguido una tendencia positiva en la captación de clientes, según los últimos datos oficiales aportados a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Ambas han aumentado su base de usuarios, aunque haya sido de forma modesta.
El que sigue como un tiro es MásMóvil, que en muy poco tiempo llegará a la cifra mágica del millón de clientes de banda ancha si sigue robando usuarios a la competencia. Además, la compañía dirigida por Meinrad Spenger puede presumir de no haber tenido que entrar en una guerra comercial. Sus precios, relativamente bajos, se han mantenido así desde que compró Yoigo y Pepephone. Ese le permite mostrar a sus accionistas que el crecimiento llega sobre el valor actual de sus servicios, lejos de las promociones que su competencia está usando cada vez más.