Cuando todavía no hemos perdido el moreno playero de la piel, Cofidis comienza a recordar la vuelta al cole y ofrecer consejos para que no se convierta en la cuesta de septiembre. Por los intereses de sus préstamos, esta quizá se transforme en un puerto “hors categorie” en el caso de sus clientes.
Libros, academias, material escolar, ropa de inverno… son muchos los gastos que tienen que afrontar las familias con el inicio de un nuevo curso. Financiarlos es una opción, aunque puede salir muy cara. Cofidis ofrece un crédito directo por valor entre 500 y 4.000 euros a devolver en un plazo variable de 12 a 42 meses, sin comisiones de apertura ni cancelación total o parcial.
Todo facilidades hasta que en la letra pequeña aparece el concepto clave: TAE 24,51 %. Un ejemplo para ilustrar el “palo” que supone este tipo de interés tan alto. Si en el simulador de Cofidis un posible cliente solicita una cantidad 3.000 euros, al terminar de pagar el préstamo habrá abonado entre 341,17 euros y 1.221,51 euros solo de intereses, en función de número de mensualidades. Si alarga al máximo los plazos para devolver el dinero, reembolsará un 140,71 % del importe recibido.
LOS CONSEJOS DE COFIDIS
Aunque sus préstamos puedan arruinar la vuelta al cole, la entidad francesa hace cinco recomendaciones que quizá ayuden a las familias:
– Aprovecha las rebajas para comprar una mochila para este curso escolar.
– Compara los precios antes de comprar para poder llevarte el mejor abrigo y las mejores botas.
– Pregunta a otros padres sobre clases particulares, te ayudarán a encontrar la mejor relación calidad-precio.
– Haz un listado del material escolar. ¡Compra solo lo necesario!
– Busca las actividades extraescolares que más se adecúen a tu hijo.
Además de apelar al sentido común y racionalizar los gastos, invierta una mañana en visitar las oficinas virtuales o físicas de las principales entidades financieras para evitar sorpresas desagradables. La vuelta al cole ya es suficientemente dura, traumática y cara como para además tener que arrastrar el pago de unos intereses desorbitados durante varios años. Aunque la cuota mensual pueda parecer pequeña, pregunte siempre la TAE y el importe total a devolver, donde verá realmente todo el sobrecoste del préstamo.