Cuando uno no quiere vender, nada tiene que hacer quien quiere comprar. Esta frase viene como anillo al dedo a la situación que se está generando alrededor de Cesce, la compañía española de seguros de créditos de la exportación. Dicho de otra manera: Bankia y CaixaBank han mostrado su interés en estar en su accionariado. Pero para que eso suceda, necesita que tanto BBVA como Banco Santander vendan parte del porcentaje que está en sus manos. Y no están por la labor.
Cesce, que en 2020 soplará velas (cumplirá medio siglo de vida), cerró el ejercicio 2016 (en mayo presentará las cuentas de 2017) con 31,6 millones de euros de beneficios antes de impuestos. Después de impuestos, esa cantidad se queda en 25,4 millones de euros. Y cuenta con unos fondos propios de solvencia de 437,5 millones de euros.
Banco Santander y BBVA deberían vender parte de sus acciones para que entraran Bankia y CaixaBank
La compañía cuenta con mayoría accionarial pública (50,25% del capital). El otro 49,75% restante se lo reparten varios bancos y compañías de seguros de la siguiente manera: Banco Santander (23,88%), BBVA (16,3%) y otros bancos el 5,67%. Lo que resta, el 3,9%, está en manos de aseguradoras.
“Nuestra parte no podemos venderla pero no tenemos ningún inconveniente en que entren otros bancos”, aseguró Álvaro Rengifo, presidente de Cesce, en un acto organizado por Nueva Economía Forum. ¿Qué ocurre? Que serían Banco Santander y BBVA quienes tendrían que abrir la mano para que tanto Bankia como CaixaBank cumplieran sus expectativas para estar en la compañía aseguradora. Es decir, que tendrían que reducir su participación. Y no están por la labor por los pingues dividendos que les aportan.
Cierto que tanto las entidades presididas por José Ignacio Goirigolzarri como por Jordi Gual podrían hacerse con la parte del resto de bancos o de las aseguradoras (estas sí parecen estar dispuestas a vender) pero serían una parte ínfima. Es decir, que esa oferta no satisface su demanda.
Bankia y la privatización fallida
Bankia y CaixaBank hubiesen visto las puertas más abiertas si, tal y como estaba previsto en 2015, Cesce hubiese sido privatizada. Sin embargo, el Gobierno acabó reculando y echando por tierra tal posibilidad. ¿Lo hará más adelante? “Esa es una pregunta que hay que hacerle al ministro de Economía”, indicó el presidente de Cesce.
Pero las dos entidades financieras no son las únicas que ven con buenos ojos introducirse en el accionariado de la aseguradora. Fondos de inversión internacionales también ha mostrado su interés. “Estamos encantados que todos quieran entrar en nuestro capital. Cuantos más accionistas privados, mucho mejor”, indicó Rengifo. Eso sí, con una condición: que el Estado sigue manteniendo la mayoría del capital y la gestión.
Otro asunto al que se refirió al presidente de Cesce fue el de Abengoa. En este caso, y al contrario de los reseñado sobre su compañía, afirmó que lo normal sería que el Estado sí vendiese su participación en la enseña (es del 3,1%). “Tener acciones de empresas no es nuestro objetivo. En este caso es un accidente por una reestructuración y lo normal es que se venda”.
Y respecto al Brexit, que costará entre 40.000 y 60.000 millones, aseguró que «es una oportunidad para España y una mala noticia para todos. Donde hay un problema hay una oportunidad”.
Resumiendo: mientras que el Estado no quiere desprenderse de su parte en Cesce, tanto Bankia como CaixaBank, así como los fondos internacionales, tendrán las puertas cerradas a cal y canto. Y, una de dos, o se conforman con un pequeño porcentaje, o deberán esperar a que BBVA o Banco Santander se desprendan de parte de sus acciones. Mientras tanto, quien sabe si el Estado da un nuevo giro y pone sobre la mesa de nuevo una privatización.