Spotify pierde más volumen del esperado

Spotify se está enfrentando a una escasez que hace temblar sus cimientos. El pasado martes el número de portadores de títulos de la empresa que vendieron acciones en la cotización directa de la compañía fue mucho menor de lo que se esperaban los asesores. Esto podría haber provocado el aumento del precio.

Si bien abrieron a 165,90 dólares a los pocos minutos habían subido hasta los 169 dólares. Fueron 5,6 millones los que cambiaron de dueño al precio que Spotify tenía en el momento de la apertura, según datos que ha podido compilar Bloomberg. En cambio, fueron alrededor de 30,5 millones las acciones que se negociaron antes de que se cerrara la acción a un 10% por debajo de su precio de apertura, a 149 dólares.

El problema es que la caída no frenó por lo que las acciones han llegado hasta los 144,22 dólares, dándole así un valor de mercado a la compañía de 26.000 millones de dólares. Estas cifras sí se asemejan más a los niveles de los que hablaban los asesores para las negociaciones de las acciones, según personas del entorno.

A los asesores de la compañía les preocupaba que hubiera una restricción de liquidez, por el hecho de que no haya suficientes acciones para satisfacer la demanda en el momento de la emisión. Esto puede provocar un aumento en las acciones a una valoración insostenible, debido a que el volumen cayó al 11% del capital flotante.

El volumen de negociación estuvo muy por debajo de las ofertas públicas iniciales de otras cinco compañías de tecnología que salieron a bolsa con una valoración de mercado de 10.000 millones de dólares a 40.000 millones de dólares. En el caso de Spotify, se esperaba que la dinámica de negociaciones, pero en su segundo día de cotización en bolsa el porcentaje de acciones que cambió de manos también fue mucho menor que en el caso de Twitter, Snap o Dropbox.

La cotización directa es una maniobra que normalmente no suelen adoptar las grandes empresas, y mucho menos una compañía que ya está establecida. Es por esto que resulta muy extraño que Spotify siguiese ese camino con la diferencia de que acabo siendo beneficioso. Las acciones se cotizaron de manera eficiente con relativamente poca volatilidad.

Era obligatorio y necesario conseguir un número suficiente de accionistas que vendieran sus acciones, por lo que los asesores tuvieron que pasar seis largas semanas hablando con los inversores para evaluar su interés sobre la venta.

“La valoración inicial de las acciones de Spotify puede estar impulsada por una oferta limitada en medio de una preponderancia de inversores estratégicos y accionistas afiliados”, escribieron Jitendra Waral y Sean Handrahan de Bloomberg Intelligence.

Fue la mesa de operaciones de Morgan Stanley la que estuvo detrás de la mayor parte del volumen que se consiguió el primer día, lo que llevó a procesar 18,5 millones de acciones que cambiaron de manos. Goldman Sachs ocupó el segundo lugar con 2,3 millones de acciones.

El debut en el mercado de Spotify supuso un beneficio inesperado para las compañías de música que adquirieron acciones hace varios años. Sony obtendrá una ganancia de casi 1.000 millones en base al 17% de sus posiciones vendidas. Esto equivale a 1.7 millones de acciones, según datos compilados por Bloomberg.

Alex Barinka para Bloomberg