Los policías locales de Madrid vuelven a casa

Los agentes locales de la Comunidad de Madrid están de enhorabuena. A partir del año 2019, todos los nuevos policías serán formados en la antigua academia, localizada en la carretera de Colmenar, y cerrada por el gobierno ‘popular’ de Ignacio González, expresidente regional, en el año 2013. Esta medida está contemplada dentro de la nueva Ley de Policías Locales, aprobada por la Asamblea de Madrid el pasado mes de febrero. Los cierto es que a pesar del paso del tiempo -más de cuatro años- las instalaciones se conservan en muy buen estado. Serán 98 nuevos alumnos los encargados de reinaugurar una academia, que «nunca debió de haber cerrado», según fuentes policiales.

La noticia ha sido muy bien recibida en los sindicatos policiales y en los propios cuerpos de seguridad locales. De hecho, CCOO ha sido un actor clave en la consecución de este hecho. La academia tiene una extensión de 130.774 metros cuadrados y se encuentra ubicada en la carretera de Colmenar Viejo. Las dotaciones son extraordinarias: una galería de tiro, pistas de atletismo, un gimnasio, campos de práctica y una galería de tiro.

Esta medida, aunque aprobada en el mes de marzo, fue confirmado hace tan sólo unas semanas, cuando el consejero de Presidencia, Ángel Garrido, anunciaba en el pleno la recuperación de la academia local. Además, Garrido también advirtió de que las instalaciones también servirán para impartir formación integral de Seguridad y Emergencias. Esto significará que el centro no sólo lo ocuparán aspirantes a policías locales. También disfrutarán de estas instalaciones bomberos, agentes forestales y personal del SUMMA 112 y de Protección Civil.

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Con esta centralización de la seguridad, la Comunidad de Madrid busca una mayor compenetración entre cuerpos. Además, también se producirá un significativo ahorro en gasto público. Hasta ahora, estas formaciones se realizaban en otros centros -propios y ajenos- y por lo tanto el aglutinar la actividad en una sola sede supondrá un desahogo para las arcas regionales. La academia tendrá una capacidad para absorber cursos de más de 16.000 profesionales de seguridad y protección civil.

Los policías locales vuelven a su antigua casa.
Estado de las instalaciones de la academia de policías locales de Colmenar.

En un principio, la primera partida económica destinada a la reapertura de la academia será de 2,4 millones de euros. Cabe recordar que en el momento en el que González decidió cerrar la instalación ésta contaba con 20 profesionales y con un presupuesto de cerca de 4 millones de euros.

En la sede de la formación de estos profesionales de la seguridad también se podrán realizar pruebas físicas y de conocimientos en las oposiciones no sólo de acceso, sino también de promoción interna en los diferentes cuerpos antes mencionados.

Los policías dicen adiós a Ávila

Esta decisión supondrá también un alivio para la academia de la Policía Nacional en Ávila, que hasta ahora se encargaba de formar también a los locales. Con el cierre del complejo de Colmenar Viejo, fueron las instalaciones de CNP las que absorbieron a los aspirantes a policía local. Un convenio firmado por la Comunidad de Madrid y Policía Nacional así lo permitía.

En este sentido, tanto la Policía Nacional como las policías locales ganan. Los primeros lamentaban la saturación de alumnos que sufría el centro abulense y los segundos se quejaban de una deficiente formación. Los sindicatos policiales -sobre todo de la Policía Municipal de Madrid- siempre han argumentado que los agentes llegaban poco adiestrados en algunas materias y competencias de los cuerpos locales. «Tras su paso por la academia de Ávila los policías necesitan uno o dos meses más de aprendizaje, porque hay muchos conocimientos, que no competen a la Policía Nacional, que no han adquirido», señalan fuentes policiales.

Mala comida, pésimo sueldo y peor estancia

Aunque la formación académica no es la única queja emitida por los sindicatos policiales al respecto del complejo de Ávila. La comida y el precio de la estancia eran otro los motivos de queja. En alguna ocasión las centrales han denunciado la pobre alimentación de los agentes e incluso han trasladado la queja a Javier Barbero, concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Madrid.

Pero la calidad de la comida no era el único obstáculo a salvar hasta ahora. Después de años de estudio, esfuerzo y unas duras oposiciones, los aspirantes reciben un sueldo bruto de 648 euros durante el periodo de aprendizaje. Pero con el cierre de la academia de Colmenar y el traslado a Ávila los aspirantes debían -y deben todavía- abonar una cuota mensual de 329,05 euros al mes por manutención y 24,75 euros por el servicio de lavandería. Al final, y tras descontar los gastos, el sueldo de los nuevos agentes apenas alcanza los 300 euros. Por lo tanto, con la reapertura de la academia los agentes también verán reducidos sus gastos.

El convenio sigue vigente

La colaboración entre Policía Nacional y la Comunidad de Madrid todavía sigue vigente, pero los convenios firmados en su día quedarán todos ellos sin efecto cuando comience a funcionar las instalaciones de Colmenar, a finales de 2018 o comienzos del año 2019.

De todos modos, la reinauguración de la academia es sólo una medida más encuadrara en la nueva Ley de Policías Locales. El texto aprobado, que modifica la Ley de coordinación de policías locales de la Comunidad de Madrid de 1992, modifica la denominación de las categorías jerárquicas, así como los grupos y escalas de pertenencia de los agentes y los mandos de las policías locales.

La nueva Ley contempla la creación de la Comisión Regional de Coordinación de las Policías Locales con representación de los municipios de la Comunidad y los sindicatos «más representativos». También autoriza la cesión temporal de policías locales entre municipios para cubrir «situaciones especiales y extraordinarias», como las fiestas patronales.