El furor por el cobalto sigue sin ganar al petróleo

La compañía de streaming y regalías más valiosa del mundo ve más oportunidades en los combustibles fósiles en los Estados Unidos que en las codiciadas materias primas para baterías como el cobalto y el litio.

Franco-Nevada Corp. que paga por adelantado por una participación en la futura producción, concentra su atención en la enorme cuenca pérmica, donde puede concretar lucrativas transacciones en torno de los 500 millones de dólares señaló el presidente de la compañía, Pierre Lassonde, en una entrevista para Bloomberg TV. En el caso del cobalto, un componente clave de las baterías recargables, las oportunidades son pequeñas y pocas, y los inversores sobrestiman la rapidez con que la demanda se desplazará hacia los vehículos eléctricos.

“Todo esto es muy desproporcionado”, declaró Lassonde el lunes desde el cónclave anual de minería de BMO en Florida. “Los tiempos que se barajan son demasiado optimistas. A la industria le va a llevar mucho más tiempo llegar a dimensiones importantes”.

Si bien el cobalto ofrece pocas oportunidades significativas de streaming, Franco-Nevada planea evaluar una transacción ofrecida en Canadá, dijo. Cuando se le pidió que confirmara si esa transacción canadiense es con el complejo de níquel Voisey’s Bay de Vale SA, contestó: “Tal vez. Sí”.

La electrificación ha concitado la atención de los inversores que asisten esta semana al cónclave de BMO, según Ilan Bahar, uno de los jefes de metales y minería del banco.

Por otra parte, a medida que se expande la búsqueda global del componente de las baterías recargables, Agnico Eagle Mines Ltd. desempolva sus activos de cobalto en Ontario con miras a una posible venta. La compañía productora de oro con sede en Toronto analiza sus tenencias de cobalto en Canadá luego de recibir cinco o seis consultas, dijo el lunes en una entrevista el máximo responsable, Sean Boyd.

Para Franco-Nevada, las oportunidades son mucho mejores en la cuenca pérmica, dijo Lassonde.

Las compañías de streaming proporcionan financiamiento a productores a cambio de una participación –o stream- con descuento en la producción futura. Si bien las compañías mineras lamentaron la declinación de las materias primas, Franco-Nevada, que tiene sede en Toronto, la consideró una oportunidad de comprar participaciones en activos de primera línea a precios de liquidación.

El máximo responsable de Franco-Nevada, David Harquail, dijo en 2016 que a la compañía le gustaría concretar dos transacciones más por encima de los 500 millones de dólares.

Danielle Bochove para Bloomberg