Caixabank, líder en exprimir a los clientes con comisiones

Las comisiones se han convertido en un pilar esencial para los ingresos bancarios, y no hay entidad que mejor haya comprendido está nueva realidad que Caixabank. La entidad presidida por Jordi Gual Solé fue la líder en exprimir a sus clientes para engordar sus beneficios en 2017, que fueron de récord, al igual que el volumen cobrado por comisiones.

El pasado viernes, Caixabank presentó sus resultados anuales. Las cuentas se podían leer desde dos prismas distintos. Por un lado, la de medios ‘más afines’ a la firma catalana que rápido titularon eso de «Beneficios récord». Por otro, la valoración del mercado, que dictaminó que las cuentas no eran lo suficientemente sólidas y que llevó a Caixabank a perder casi un 3% de su valor en bolsa.

Su ROTE se ha quedado un 25% por debajo de lo previsto y sigue muy por debajo de sus competidores

El principal problema es que la entidad presidida por Gual Solé no alcanzará los objetivos 2018 planteados en el Investor Day de marzo de 2015. Además, Caixabank no lo ha logrado en partidas tan importantes como la tasa de morosidad, que no la ha situado por debajo del 4%. Tampoco ha mejorado como pretendía su ratio de eficiencia. Pero en especial, su ROTE –que mide la rentabilidad que obtienen los accionistas sobre los fondos invertidos de la sociedad- se ha quedado un 25% por debajo de lo previsto y sigue muy por debajo de sus competidores.

Bajo este contexto, los resultados de Caixabank solo se pueden leer en la premisa de mejora de ingresos, y gran culpa de ello lo tiene su voracidad por cobrar comisiones. Los ingresos bancarios se constituyen principalmente a través de dos partidas: primero el margen de intereses y después las comisiones. Estas últimas, aunque en teoría suponen un cobro que percibe el banco por ofrecer un servicio, en realidad son un colchón modificable para amortizar los impactos de la primera partida. El modo de jugar con ellas es sencillo, cuando la principal partida -margen de intereses- cae, se intenta compensar con más comisiones, y viceversa.

Caixabank líder en comisiones

En la actualidad, el margen de intereses de los bancos ha descendido de manera drástica. La caída se debe a las medidas tomadas por el Banco Central Europeo (BCE) que ha reducido hasta cero la tasa de intereses. Es por ello que la banca se ha visto obligada a tirar de las comisiones para mantener sus beneficios.

Caixa comisiones Merca2.es

Caixabank ha sido la entidad que más ha preferido exprimir a sus clientes y mantener sus beneficios a través de las comisiones. La firma catalana ha visto mermar sus ingresos por intereses un 24% desde 2012. Esto es importante, porque una cuarta parte de su nicho vital de su negocio se ha hundido desde 2012. A pesar de ello, presume de que sus ingresos netos han crecido un 15%, desde los 7.146 millones hasta los 8.222 que publicó el pasado viernes. Entonces, ¿qué ha pasado? Fácil, que ha utilizado una política agresiva de comisiones para compensar la caída de los ingresos de intereses. En concreto, desde 2012 la firma ha incrementado casi un 36% sus ingresos por comisiones.

Al final, las cuentas de Caixabank terminan siendo como el truco de un trilero. Lo que no te cobra por un sitio -en intereses- te lo cobra por otro a través de las comisiones. De hecho, Caixabank es la entidad que más porcentaje del total de ingresos que ha obtenido en 2017 es a través de las comisiones. Es más, desde 2013 el peso de las comisiones sobre los ingresos ha crecido un 50%.

En 2017, Caixabank ingresó 8.222 millones de euros de los cuales 2.500 fueron a través de comisiones. Esto es, que uno de cada tres euros que ingresó la firma presidida por Gual Solé fueron a través de comisiones. En segunda posición, por detrás de la entidad catalana, se situó Bankia; después el Banco Santander; por detrás el Banco Sabadell; y por último el BBVA.

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Las comisiones por si mismas no siempre indican que un banco tenga mayor o menor agresividad a la hora de cobrar a sus clientes. Por ejemplo, BBVA ingresa casi el doble por comisiones y Banco Santander obtiene cinco veces más que Caixabank. Pero en igualdad de condiciones la entidad catalana está más agresiva, como demuestra por ejemplo que entre 2013 -bajo el mandato de Fainé- y 2017 el ratio entre comisiones cobradas y volumen de activos gestionados ha crecido un 25%.

Caixabank acelera su agresiva captación de comisiones

En los últimos años, Caixabank se ha mostrado más activa a la hora de cobrar comisiones a sus clientes. No es una opinión un cliente en concreto, existen un sinfín de casos sobre el apetito voraz de la firma catalana, sino que los propios datos confirman la actitud del banco.

Uno de los casos más flagrantes de la avidez de comisiones de Caixabank se producía dos años y medio atrás, en verano de 2015. La firma catalana fue la primera que decidió unilateralmente aplicar un doble pago por el uso de sus cajeros automáticos. La idea era que Caixabank cobraría una comisión fija extra –además de la que ya tenía en función del dinero que se sacase- a los no clientes. Meses más tarde, el propio Banco de España dispuso que la idea de Caixabank era ilegal puesto que por ley ninguna entidad puede cobrar por un servicio dos comisiones distintas.

El anterior caso es solo un ejemplo de las artimañas de la entidad en la búsqueda de engordar sus beneficios. Otro de los ejemplos lo contaba Alejandro Suárez en Merca2 hace unos días en su artículo «La Caixa y Curro Jimenez» explicando cómo Caixabank utilizaba las transferencias internacionales para cargar una jugosa comisión. Además, un pago excesivo y sin justificación que tras la queja del cliente se reducía a la mitad. Aunque si no se llama, por lo que sea, Caixabank tranquilamente engrosa su cuenta.

El futuro va contra las comisiones

El problema de la actitud de firmas como Caixabank es que la agresiva política de comisiones va en contra de la tendencia del sector. En realidad, lo que ahora engorda sus beneficios, le resta competitividad de cara al futuro. Las ‘viejas’ entidades bancarias deben ser conscientes de que el sector esta virando mucho más rápido que su mentalidad de primar los beneficios por encima de todo.

ROE2 Merca2.es
Evolución del ROE en el sector bancario.

Las fintechs están cambiando el negocio bancario y si las firmas insisten en engordar su cuenta de comisiones se pueden quedar atrás. Se puede volver a uno de los anteriores episodios, en el que Caixabank cobraba una ingente comisión por una transferencia internacional. El mismo cliente en una próxima vez podría decidirse por utilizar la fintech Transferwise y comprobar cómo la compañía tecnológica da un mejor servicio y con una comisión mucho más pequeña.

Quizás alguien en Caixabank o cualquier otra entidad considera que el potencial de las fintech todavía no es real. Acaso, que todavía quedan varios años para que sean una amenaza real pero no es así. Las nuevas firmas tecnológicas y las entidades digitales –cuyo lema es casi siempre ‘Comisiones cero’- ya han dejado su primera huella en el sector: en España el número de oficinas bancarias físicas ha retrocedido al mismo nivel de hace 40 años.

Además, esta nueva competencia está aplanando considerablemente los márgenes del sector. El ROE (retorno sobre los recursos propios) mide la rentabilidad del negocio bancario y en último lustro está en torno al 5 o 7%, en los 25 años anteriores nunca bajó del 10%. Es innegable que la política de tipos cero impuesta por el Banco Central Europeo ha limado los márgenes de intereses, pero no se puede perder de vista el efecto competencia que ha traído la tecnología fintech

En definitiva, para realmente competir en el nuevo sector financiero las entidades deben empezar a olvidar en exprimir a sus clientes. En Caixabank alguien debería acordarse del famoso refrán ‘pan para hoy, hambre para mañana’ y dejar de exprimir a sus clientes.

Pedro Ruiz
Pedro Ruiz
Colaborador de MERCA2