Ewa Krukowska, Jonathan Stearns y Nikos Chrysoloras para Bloomberg
La producción de coches eléctricos en la Unión Europea tuvo un impulso este miércoles, ya que los reguladores actuaron para cerrar una brecha tecnológica con China mediante la búsqueda de sanciones a las emisiones más estrictas en fabricantes como Volkswagen y Fiat Chrysler Automobiles.
La Comisión Europea, brazo regulador de la UE, propuso una reducción del 30% en las descargas de dióxido de carbono para el año 2030 en comparación con los niveles de 2021, como parte de una lucha contra el calentamiento global. El plan, que reducirá progresivamente los límites de CO2 existentes, presenta incentivos para que los fabricantes de automóviles cambien a coches eléctricos.
“Hay un componente de tratar de facilitar el desarrollo de una poderosa industria automovilística de coches eléctricos”, indicó Miguel Árias Cañete, comisionado de energía y clima de la UE, en una entrevista en su oficina de Bruselas. “Habrá una carrera para desarrollar coches de energía limpia. Estamos viendo que otros están tomando el liderazgo mundial”.
Europa se prepara para una revolución tecnológica en el transporte que impulsaría el motor de combustión interna tradicional de las salas de exposición a los museos en un intento por conservar el liderazgo en el mercado mundial de automóviles de pasajeros.
La comisión está aprovechando el histórico acuerdo de protección climática alcanzado por casi 200 países en París a finales de 2015 para controlar la contaminación en Europa, que ha revertido la tendencia general de caída de los vertidos de la UE de gases de efecto invernadero, incluido el CO2, por el cambio climático. Según el acuerdo de París, la UE pretende reducir dicha contaminación en al menos 40% en 2030 en comparación con 1990.
India apunta a que todos los coches vendidos en 2030 sean eléctricos
A medida que China amplía su destreza en coches eléctricos con la contundente política de cuotas, Europa cuenta con un enfoque más matizado que obliga a los fabricantes a escoger entre hacer que el motor a combustión sea más limpio o abandonarlo en favor de los coches eléctricos.
Sin Tesla
“Si vemos lo que sucede en los Estados Unidos y las cifras de producción de Tesla de 2016, ellos hicieron alrededor de 80.000 coches”, según Cañete. “El gran problema es China, que tiene un objetivo obligatorio de reducción del 10% en 2019, 12% en 2020 y 7,5 millones de coches por año en el futuro.
El mercado chino ya cuenta con 400 tipos de coches eléctricos, mientras que Europa tiene seis, según Cañete. India, por su parte, apunta a que todos los coches vendidos en 2030 sean eléctricos. “Si vemos las cifras de la Unión Europea en este momento, apenas representan el 1% de la flota”.
“Hay una gran brecha entre la Unión Europea y los países en desarrollo”, dijo Cañete. “Esta propuesta tiene un elemento de incentivos para inducir a los fabricantes a producir una variedad sustancial de coches eléctricos”.
La propuesta de la comisión, que necesitará la aprobación de los gobiernos de la UE y del Parlamento Europeo en un proceso que lleva más de un año, también incluye 800 millones de euros para el desarrollo de infraestructura para cargar coches eléctricos, según Cañete.
Los incentivos planeados para la producción de coches eléctricos tomarán la forma de créditos contra los objetivos más estrictos. Los límites actuales de la UE para el CO2 de los automóviles son de 130 gramos por kilómetro establecidos para 2015 y 95 gramos fijados para 2021.
Los límites existentes son promedios para la flota de la UE en su conjunto, con fabricantes individuales que tienen objetivos específicos respaldados por sanciones financieras. El sistema por infracciones permanecerá en vigencia para los límites de 2025 y 2030.