jueves, 12 diciembre 2024

El ex CEO de Rio Tinto enfrenta cargos por un fraude milmillonario

David Stringer para Bloomberg

El grupo Rio Tinto, la segunda empresa minera más grande del mundo, y dos de sus ex altos ejecutivos fueron acusados de fraude bajo el alegato de inflar el valor de los activos del carbón en Monzambique, adquiridos por 3.000 millones de dólares (2.548 millones de euros), informó la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés).

La firma con sede en Londres, su ex director ejecutivo, Tom Albanese y el ex director de finanzas, Guy Elliot “fallaron en cumplir con los estándares de contabilidad y las políticas de la compañía en la valoración y registro de sus activos de manera precisa”, dijo la SEC este miércoles en un comunicado.

“Rio Tinto intentó defenderse vigorosamente contra estas alegaciones”, comunicó la compañía a través de un comunicado de prensa enviado por correo electrónico.

“Rio Tinto intentó defenderse vigorosamente contra estas alegaciones”

En otro reporte, la Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido precisó que Rio pagará una multa de 27,4 millones de libras (30,71 millones de euros) por no cumplir con las reglas de divulgación, al no llevar a cabo una prueba de deterioro y reconocer una pérdida en el valor de los activos en Mozambique. La empresa acordó pagar en una etapa temprana y recibió una reducción del 30% en su sanción.

Según la demanda introducida por la SEC en un tribunal federal en Nueva York, Rio Tinto recaudó 5.500 millones de dólares de inversores estadounidenses (4.627 millones de euros), incluyendo 3.000 millones de dólares (2.548 millones de euros) después de mayo de 2012, cuando los ejecutivos informaron a Albanese y Elliot que la unidad de carbón de Mozambique probablemente tenga un valor de sólo 680 millones de dólares (578 millones de euros).

“Como lo alegamos en nuestra demanda, los altos ejecutivos de Rio Tinto presuntamente incumplieron sus obligaciones de divulgación y corporativas al ocultar a la junta directiva, al auditor y a los inversiones el hecho crucial de que una transacción multimillonaria fue un fracaso”, comentó Stephani Avakian, codirectora de la división de ejecución de la SEC.

Rio Tinto adquirió en 2011 Riversadale Mining, el propietario de los activos, en un acuerdo en efectivo por 3.900 millones de dólares (3.313 millones de euros). Dos años después se acordó que el valor de los activos sería de 3.000 millones de dólares (2.540 millones de euros). El caso, que forma parte de una amortización de activos mayor a 14.000 millones de dólares (11.894 millones de euros), condujo a la partida de Albanese en 2013 y a la de Elliot en abril del mismo año.

La SEC anunció en 2016 que investigaba el cargo por desvalorización de 3.000 millones de dólares (2.540 millones de euros). Rio dijo más tarde que vendió las operaciones en 2014 por 50 millones de dólares (42,48 millones de euros).

En noviembre, la compañía aseguró que había alertado a las autoridades, incluyendo al Departamento de Justicia de los Estados Unidos y a la Oficina de Fraudes Graves del Reino Unido, por un pago en 2011 de 10,5 millones de dólares (8,92 millones de dólares) a un consultor externo, en relación con el proyecto de mineral de hierro Simandou, en Guinea. El presidente de Rio Tinto, Jan du Plessis, señaló en abril que la empresa se mantuvo en conversaciones las autoridades de ambas organismos.


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