Responsables de la Guardia Civil se han quejado a sus mandos superiores del veto que se ha impuesto en la Generalitat de Cataluña para que ni ellos ni la Policía Nacional puedan participar en las investigaciones de los atentados de Barcelona y Cambrils. Fuentes del Ministerio del Interior reconocen que estas quejas «han llegado a los mandos políticos, pero la realidad es que no tenemos mucho margen de maniobra»
De hecho, estas mismas fuentes señalan que uno de los factores que ha influido en los atentados ha sido, precisamente, la ausencia de los expertos en la lucha contra el terrorismo de la Policía y la Guardia Civil en términos generales allí en Cataluña, precisamente «una comunidad en la que se da cita el mayor número de casos de radicalización islamista, entre otras cosas porque es donde hay una mayor afluencia de inmigración musulmana».
Con esto las mismas fuentes aclaran que «no hacemos a nadie responsable de lo que ha pasado», sino que simplemente reclaman que en asuntos de tanta trascendencia para el interés general de España como es la lucha contra el terrorismo, «no deberían existir suspicacias ni producirse enfrentamientos o choques de competencias, sino que debería haber una absoluta y desinteresada cooperación, por el bien de todos».
De ese modo, añaden, se habría podido evitar este atentado. En ese sentido, estas fuentes añaden que difícilmente se les hubiera escapado a los expertos de la Guardia Civil o la Policia Nacional, e incluso del CNI, que algo rato había detrás de la explosión de Alcanar a la que, sin embargo, los Mossoss de Esquadra no dieron ninguna importancia, y ahora se ha sabido que la tenía toda.
«Difícilmente se nos habría escapado algo así… como tampoco se nos habría escapado que había un reducto de radicalización en Ripol, y las leyes españolas permiten detener a quienes se radicalizándose, precisamente porque en ese sentido tenemos la legislación preventiva más avanzada de Europa«, añaden estas fuentes. Pero es evidente que los Mossoss, «siendo un cuerpo ejemplar -añaden-, no tienen la experiencia ni la formación en lucha contra el terrorismo que tienen policía y Guardia Civil», concluyen.