El presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, ha pedido a todos los miembros de su Gobierno que esté disponibles para el próximo día 8 de agosto. No es una fecha cualquiera. Es el límite temporal, el último día hábil para que el Gobierno catalán pueda convocar elecciones anticipadas para el 1 de octubre de este año, es decir, coincidiendo con la fecha de convocatoria del referendum ilegal.
No quiere decir que vaya a ser así, pero es evidentemente una de las opciones que contempla la generalitat para poder sortear las prohibiciones del referendum y llevarlo a cabo. Al celebrarse el mismo día las elecciones –legales- autonómicas, la Generalitat cree que podría instalar las urnas ilegales junto a las de las elecciones al parlamento catalán, y que eso llevaría a que también los contrarios a la independencia acabaran votando en el referendum, dándole mayor relevancia.
Miembros del Gobierno creen que el referendum se celebrará, aunque con participación menor a la que se espera el Ejecutivo catalán
Sin embargo, es bastante probable que en ese caso la Junta Electoral Central invalide las elecciones autonómicas, con lo que la operación no habría servido para nada. Pero, ¿qué ocurriría si en lugar de instalar las urnas dentro de los colegios electorales, se instalan a las puertas de los mismos? En ese caso, la Junta Electoral tendría más complicado intervenir, y debería ser una orden directa a los Mossos la que impidiera la celebración del referendum.
Y es aquí donde está el problema. Ahora mismo el cuerpo de los mossos está muy dividido, e incluso aunque el Gobierno utilizara la ley de Seguridad Nacional para hacerse con el mando, es bastante probable que se produjeran deserciones y que no todos los agentes cumplieran, ni todos los mandos trasladaran la orden a sus subordinados.
Fuentes consultadas por Merca2 en el ámbito del constitucionalismo creen que finalmente el referendum se acabará celebrando, aunque tendrá menos participación que el que convocó Artur Mas porque, en este caso, “el Gobierno está haciendo todo lo posible por evitarlo, cosa que no hizo entonces”. Pero que esté haciendo todo lo posible no significa que vaya a poder evitarlo: “Es muy difícil, ellos tienen todo, o casi, bajo control, y una decisión firme de hacer el referendum”
Lo cierto es que a partir de hoy y los próximos días van a ser fechas muy importantes de cara al futuro de Cataluña, y una vez que Rajoy ha sorteado su comparecencia ante el tribunal del caso Gürtell toda su atención se va a centrar en dar respuesta a cada paso que se de en estos días por parte de la Generalitat, de modo que la escalada de tensión va a ser muy notable.