Empieza a cundir el desánimo entre los productores de energía fotovoltaica. Creen que el Gobierno ha optado por una política de renovables basada en la eólica, dejando a un lado al la solar. Afirmación que llega tras conocer el borrador para la próxima subasta de energías renovables anunciado por Mariano Rajoy. En él, a falta de conocer las horas destinadas a cada tipo de energía, se establece que los adjudicatarios que tengan el mejor precio serán aquellos que resulten ganadores. Es decir, que la solar «no recibiría ni un sólo megavatio», como ocurrió en la subasta celebrada hace tan sólo diez días.
Les llama la atención las prisas por parte del Gobierno a la hora sacar una nueva subasta de 3.000 MW, que se celebrará antes de que llegue el próximo verano. El ministerio de Industria lo justifica por la necesidad de acelerar el ritmo para llegar a los objetivos del año 2020. En aquel entonces el 20% de la energía debe ser renovable.
¿Hay presiones?
Sin embargo, en las fotovoltaicas están convencidos de que detrás hay algo más. «No es normal que no se apueste por la solar», claman. Así que sospechan que puede haber algún tipo de presión «para favorecer a las grandes compañías». Aunque en la última subasta prácticamente los 3.000 MW subastados fueron a eólica, la gran ganadora fue Forestalia que se llevó la mitad. Gas Natural y Endesa se llevaron mucho menos de lo que esperaban e Iberdrola se quedó fuera del concurso; algo llamativo teniendo en cuenta que es la líder de potencia instalada con más de 5.000 MW instalados en este momento.
Creen que las presiones vienen motivadas por el nerviosismo en las eléctricas; así que en el sector creen que ha podido haber presiones por parte del looby eléctrico para acelerar al máximo una nueva ejecución. De hecho, todas las empresas analizarán presentarse al concurso, pero la que más interés tendrá en hacerlo es la compañía de Sánchez Galán. El año pasado no aumentó su capacidad instalada en nuestro país; y otro más en blanco no resultaría positivo. No en vano, la eólica supone el 38% de la producción en renovables en España para la compañía.
Pese a todo, los productores solares tienen todavía un alo de confianza. Esperan que impere la cordura, y se ayude a que la fotovoltaica pueda competir en igualdad de condiciones . «Todo va a depender del número de horas que den a una energía y a otra».
Esa será la clave para las fotovoltaicas, que esperan su momento, pero también para el resto de jugadores del sector. De hecho, es más que probable que si se mantiene la eliminación de primas; o el precio fijo; Acciona no acuda a la subasta. Lo dijo su presidente, José Manuel Entrecanales, en la Junta de Accionistas: «el modelo de las subastas no es atractivo y hasta que no cambie el sistema no vamos a acudir; además, tenemos ya suficiente peso nacional».
Así que ahora Entrecanales opta por buscar una mayor presencia internacional en el sector; pero también dentro del inmobiliario, en donde sí observa una alta rentabilidad para desarrollar su actividad en los próximos años.
El pasado de las renovables
Más lío para el Gobierno que no termina de dar con la tecla para expandir las energías renovables sin encabronar a nadie. De hecho, España ya acumula una treintena de demandas de inversores internacionales que se sienten perjudicados por los cambios establecidos por el Gobierno en el sector. No hay que olvidar que el Ejecutivo decidió recortar las primas, cambiando por completo el esquema de licitación; algo que no ha gustado nada a los inversores.
De hecho, a primeros de mes conocíamos que el CIADI, el tribunal de arbitraje internacional del Banco Mundial, condenaba a España a pagar 128 millones de euros más intereses a Eiser Infrastructure.
