‘El Rey de las camas’ entra en concurso

Seguro que los más mayores del lugar se acordarán de este anuncio, en el que Lorenzo Lamas se presentaba como el Rey de las Camas, en América… Porque aquí ya se sabe quién es el Rey: Reig Martí.

La empresa valenciana se ha declarado en concurso voluntario de acreedores después de cinco años en números rojos en su cuenta de resultados. Así se puede comprobar en datos de Insight View, en donde se refleja que en 2015 las pérdidas alcanzaron los 4,9 millones de euros. De hecho, el último año en positivo fue el 2010, cuando logró un resultado de algo más de 230.000 euros.

De hecho, el último informe de auditoría lleva aparejada la opinión con salvedades; todas ellas referidas a la imposibilidad de comprobar operaciones de cobros e inversiones financieras y en empresas del grupo. En total, dudas sobre algo más de 1,2 millones de euros. Y llama la atención también el elevado endeudamiento de la compañía, que supera los 11 millones de euros; con una cifra de negocio de poco más de 12 millones de euros.

Incapaz de adaptarse

Reig Martí fue fundada en 1951, y actualmente es presidida por María Antonia Reig. Su época esplendor llegó entre los 70 y los 90, cuando buena parte de las camas de este país vestían alguno de los productos de la firma. Sin embargo, la llegada de Ikea –con los precios a bajo coste- y la moda de los nórdicos; unido a la pérdida de aranceles en los países con una mano de obra más barata, puso en riesgo el modelo de negocio que, aunque lo ha intentado, no ha sido capaz de modernizarse.

El concurso de acreedores llega tan sólo dos meses después del último ERE puesto en marcha por la compañía. En él la mitad de la plantilla abandonaba la compañía, que ahora cuenta con 55 empleados. Aun así, los trabajadores llevan meses denunciando los impagos en las nóminas.

Todo parece indicar, salvo que aparezca un inversor de última hora, que el Rey de la Cama está abocado a la insolvencia y, por tanto, a la extinción. El mismo camino que siguió su filial Finitextil, que echaba el cierre a finales del año pasado.