No es un problema exclusivo de los nuestros tiempos. De hecho, y para ser sinceros, la alopecia ha sido un quebradero de cabeza -nunca mejor dicho- para la mayor parte de los hombres a lo largo de la historia.
Ya desde los tiempos antiguos se utilizaban métodos para intentar combatirla. Y es que, a todos nos suena ver a Julio César representado con su corona de laurel, la cual cual utilizaba para tapar sus incipientes entradas.
Pero no fue el único en la antigua Roma en desarrollar un complejo , el emperador Domiciano también estuvo bastante preocupado por este problema capilar. De hecho, mandaba a los artistas que le representaran con una generosa cabellera rubia, a la que muchos le atribuían reminiscencias leónicas.
De no hacerlo, el creador de la obra de arte se jugaba su propio cuello. Lo que llama especialmente la atención es que ya, en aquella época, se producían productos a través de especies vegetales para combatir este problema.
En este sentido, el dermatologo, Donis Muñoz Borrás, aseguraba lo siguiente en su portal web, donde da consejos a los posibles pacientes para no caer en engaños: «La calvicie es tan antigua como la humanidad y desde siempre se ha conservado una demanda de soluciones que, la mayoría de las veces han acabado en el desencanto o en el engaño»
Esta de acuerdo con está afirmación de su compañero de profesión, el tricólogo -experto en dermatología capilar-, el doctor Sergio Vañó, quien asegura que «los productos milagros siempre han existido».
Son engaños absolutos para gente desesperada por su problema. No valen para nada y, de hecho, algunos de ellos suelen producir traer algunas complicaciones a sus usuarios. Recuerdo que varios pacientes han venido a mi consulta con dermatitis causadas por este tipo de productos«, continua el mismo Vañó sobre este tema.
Lo que en ningún caso pueden entender los expertos es que la opinión pública pueda creer en este tipo de artículos que en algunos casos llegan a prometer que se recuperará la calidad capilar en tan solo quince días.
«La comunidad médica y científica sería la primera en anunciar un avance significativo en la lucha contra la alopecia»
Los pacientes deberían saber que los médicos -y la comunidad científica en general- seríamos los primeros en informar sobre un producto revolucionario, a través de los medios de comunicación o en las propias consultas», asegura Vañó.
Las empresas que suelen desarrollar este tipo de engañabobos suelen disolverse una vez que los usuarios empiezan a percibir que se encuentran ante un engaño o que han sido estafados y «claro, reclaman«.
En cualquier caso, a causa de este tipo de lociones -que se pueden adquirir sobre todo a través de Internet en la actualidad- nace la expresión «te han tomado el pelo», que se usa en nuestros días para referirse a un engaño.
«Las empresas que desarrollan crecepelos mágicos se suelen disolver una vez que los usuarios empiezan a reclamar por sentirse estafados»
A día de hoy, el complejo sigue existiendo, sino solo hay que mirar el ejemplo de muchos deportistas y famosos como Iker Casillas, Wayne Roneey, Donald Trump, o Miguel de Gran Hermano; pero, por suerte, en nuestros días, también se están desarrollando un sinfín de alternativas que hacen mirar con esperanza al futuro para aquellos a los que les empieza a clarear la coronilla o notan el avance de unas incipientes entradas frontales.
La verdad es que, actualmente, estamos viviendo unos momentos realmente buenos. Es cierto que llevabamos 15 o 20 años en los que no se había avanzado mucho en la investigación de estos problemas, pero ahora estamos avanzando«, asegura el experto capilar, que además de director de la Unidad de Tricología y Trasplante Capilar de la Clínica Grupo Pedro Jaén, también realiza sus labores médicas en el Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid.
«Muchos de los productos que se están desarrollando en la actualidad tendrán un precio aceptable»
Entre las posibles nuevas soluciones para aquellos que empiezan a ver como su flequillo pierde densidad se encuentran el dutasteride -que se puede inocular a través por vía oral o inyección- a la vez de fármacos antagonistas de las prostaglandinas y agonistas de las wint. Los mismos tienen un coste aceptable.
En cualquier caso, para la alopecia androgénica, es decir aquella que se reproduce por causas genéticas y la más común en los hombres, en futuro no muy lejano «se podrán realizar intervenciones de clonación capilar a través de células madre«.
La ciencia avanza, cabe recordar -antes de finalizar- que existen otros tipos de alopecías, como la ATA o la frontal fibrosante, que tiene otro tipo de consecuencias para aquellos pacientes que la sufren. Para este tipo de problemas también se están desarrollando todo tipo de soluciones. En cualquier caso, lo que queda claro es que a la hora de tratar la caída del cabello, lo mejor es ponerse en manos de un experto y !Qué no te tomen el pelo¡