“La NASA fagocitará a empresas como Space-X de Elon Musk. El espacio es una cuestión estratégica y militar”

Su nombre pasa desapercibido para el común de los mortales, pero es uno de los españoles más destacados de este 2016 que ahora termina. Guillem Anglada-Escudé es profesor de astrofísica en la Universidad Queen Mary de Londres, y ha sido escogido por la revista Nature como uno de los 10 científicos más importantes del curso.

Un reconocimiento al que resta méritos “puesto que hubiera preferido que se reconociera el trabajo en equipo, aunque tampoco vamos a quejarnos”, ríe. Todo por el trabajo en el que participa junto a su equipo, y que les ha permitido descubrir el plantea más cercano a la Tierra fuera del Sistema Solar. Se trata del exoplaneta Proxima-b, que podría ser habitable, y que orbita alredor de la estrella de Proxima Centauri.

Un avance que permitiría reconocer cuerpos similares cerca del Sol, pero también observarlo y conocer cómo está estructurado, dado que “es la estrella más cercana al sol que existe”, nos explica el investigador.

P ¿Cuáles son los siguientes pasos que tenéis que dar en el proyecto de investigación que lleváis adelante?

Básicamente nos vamos a centrar en la observación. De momento no lo hemos visto. Lo hemos detectado de forma indirecta a través de la estrella. Sabemos que es parecido a la Tierra. Con esa información podemos inferir que tiene una temperatura adecuada y características similares. Hay gente que dice que puede ser habitable, otros que no. Tendremos que ver si tiene atmósfera o no. Eso es lo que hay que hacer ahora.

P ¿Cuánto tiempo os puede llevar?

Si el Planeta transita, y la órbita está alineada, podremos hacerlo el año que viene. Pero es algo difícil que ocurra. La idea es que en dos o tres años podamos saber si tiene atmósfera o no, y un poco más adelante tener una imagen que nos permita saber si tiene gases similares a los de la Tierra. Pistas, en defitiniva, que nos digan si hay o no hay vida.

En paralelo a eso, queremos extender la búsqueda a Próxima Centauro –la más cercana- y a las otras 10 ó 20 más cercanas al Sol. Habiendo detectado este Planeta, quiere decir que podremos detectar el resto.

P ¿Cuál es el presupuesto que tenéis?

No hay presupuesto directo. Hemos utilizado herramientas que ya funcionan, y que forman parte de otros proyectos. Sí se puede hacer una estimación indirecta, y el coste es de medio millón de euros.

P ¿Echáis de menos un mayor apoyo institucional y en materia de financiación?

Hay lo que hay. Siempre se pide más. Es suficiente para ir haciendo cosas. Realmente no hay impulso de los Gobiernos. Esto tendría que venir de la población. Se invierte más en deporte o en otras cosas menos fundamentales. Es una cuestión democrática. También pasa con las empresas. Ellas tienen que ganar dinero, y no se van a poner con esto porque no tienen un retorno inmediato o a medio plazo. Siempre digo que vivimos de los excedentes, y con ellos hacemos lo que podemos. Si nos propusiéramos como sociedad explorar el universo, igual podríamos hacerlo. Es un tema económico, no tecnológico, porque la tecnología ya existe.

P ¿Por qué a la gente no le preocupa lo que pueda ocurrir más allá de la Tierra?

Porque es lo inmediato. Nos afecta a nosotros. Tenemos problemas a solucionar aquí. Ahora bien, que la mayor parte de los problemas que tenemos hoy en día no son una cuestión de tecnología, son meramente políticos. Hay recursos y tecnología para solventar el hambre y la guerra en el mundo.

P ¿Vale la pena financiar la observación y la carrera por llegar al Universo?

Hay que inveritr en cosas nuevas. La frontera está en el espacio y hay que hacer una apuesta por ello. Es un tema de voluntad, no de posibilidad.

P ¿Cómo ves la labor de las empresas privadas que preparan lanzamientos como Space-X de Elon Musk?

Me parece genial. Hace años que se habla de ello, aunque no he visto tanto progreso como el que decían. Ahora parece que Space-X va más en serio. Creo que serán fagocitados por la NASA, y frenará el boom. El acceso al espacio es un tema estratégico y militar, y a Rusia, Estados Unidos o China les interesa tenerte controlado. Veremos cómo sobrevive Space-X a la fagocitación del gobierno americano.

P ¿Viajaría al espacio?

Claro que sí. Yo quería ser astronauta. La detección de planetas es lo que encontré que podía hacer empezando desde abajo e ir subiendo y trabajando para hacer algo significativo. Si en unos años se pudiera ir a Marte, estaría encantado de participar.

P ¿Por qué en España no se pueden llevar a cabo proyectos similares al suyo?

El problema en España es que no nos creemos que podemos hacer cosas. Es un tema cultural. Se dice que no vale para nada. Si hay que ganar dinero, mejor el espectáculo. Esta falta de actitud nos lastra. No nos creemos que podemos ser líderes y que hay que dar soporte a proyectos desde el principio. Hay que dar recursos al emprendedor científico. La mayor parte de la gente que está en ello es por vocación, pero hay una falta de confianza que hace que todo esté super controlado por la burocracia.