La economía de la zona euro sigue a la espera de un repunte

El repunte económico de la zona euro esta previsto para este trimestre pero sigue sin materializarse, por el momento.

Después del mal clima, las huelgas y una epidemia de gripe que afectó al crecimiento a principios de año, la industria y los servicios sufrieron otro revés en mayo, cuando un número inusual de días festivos impactó los pedidos. En una señal de que los inversores se están impacientando con la economía de 19 naciones, la moneda única cayó al nivel más bajo desde noviembre.

Para los responsables del Banco Central Europeo, que preparan la trayectoria futura de la política monetaria, los datos podrían significar el aplazamiento de la decisión para reducir el estímulo sin precedentes hasta que puedan evaluar mejor la salud económica de la región. Hasta el momento, los miembros del Consejo de Gobierno han expresado su confianza en que los fundamentales para las perspectivas de crecimiento e inflación no se han descarrilado.

En mayo, el crecimiento de pedidos nuevos en el sector privado se debilitó, las contrataciones y el trabajo atrasado mostraron tasas de crecimiento más lentas y las empresas se volvieron menos optimistas respecto a las perspectivas, según IHS Markit. El índice de gerentes de compras cayó a un mínimo de 18 meses en 54,1, una lectura más débil de lo que los economistas habían pronosticado.

¿Bache temporal?

Esto «cuestionará la postura de que la economía solo está atravesando un bache temporal débil», dijo Anders Svendsen, economista de Nordea Markets en Copenhague. «Las cifras refuerzan nuestra opinión de que la reunión de junio llegará demasiado pronto, y el BCE esperará hasta la reunión de julio antes de tomar decisiones importantes sobre el futuro de la política monetaria».

El euro caía un 0,4% a las 11:05 de la mañana, hora de Fráncfort, y se cotizaba a US1,1727 dólares.

«Se espera que parte de la niebla se disipe con los datos de PMI de junio», dijo Chris Williamson, economista jefe de negocios en IHS Markit.

Las cifras preliminares se publicarán el 22 de junio, una semana después de que el BCE celebre su próxima reunión. Los responsables de política han indicado anteriormente que podrían esperar hasta julio para tomar una decisión sobre el programa de compra de bonos. Actualmente, las compras de activos expiran en septiembre, aunque podrían ampliarse si la situación lo justifica.

Jana Randow para Bloomberg