El yogur natural: una guerra de marcas por un misterioso precio


El alto contenido en calcio convierte a los yogures en un alimento imprescindible en la dieta de todos los grupos de edad. El yogur natural es el más recomendable para la salud, pero la marcas inventan todo tipo de combinaciones, que además de fruta, chocolate o galleta, incluyen altas dosis de azúcar. Sin embargo, este despertar alimenticio que atravesamos ha devuelto al yogur natural al puesto que nunca debió haber perdido.

Jonatan Armengol es el único crítico gastronómico invidente en España, y como ya es habitual en MERCA2, ha realizado un cata para comprobar la calidad de varias marcas de yogures naturales. Aunque los precios de este producto contemplan un horquilla muy amplia, parece que, a juicio del crítico gastronómico, el sabor de los yogures no revela tantas diferencias entre unas marcas y otras

La guerra de precios en los yogures entre supermercados y marcas es muy acusada. Pese a que se trata de un producto muy simple compuesto por leche y fermentos lácticos, los precios por los pack de yogures oscilan entre menos de un euro hasta casi los cuatro euros. Y bien, ¿dónde radica esa enorme brecha? 

Es cierto que la calidad de la leche y el proceso de elaboración influyen, pero esta cuestión sorprende si tenemos en cuenta que la mayoría de marcas de fabricante son las que elaboran las marcas blancas de los supermercados. Además del propio producto, en este caso el yogur, el envase también influye en el precio. Si analizamos varias marcas encontraos que el packaging no es igual de resistente en todas ellas, y eso conlleva problemas de peligro de contaminación o rotura en algunos casos, tal y como señala Armengol durante la cata de MERCA2

Al fin y al cabo, el gusto de cada uno es lo que determina qué marca escogemos en el supermercado en función del grado de acidez, cremosidad y más o menos presencia de notas lácticas. Lo importante es, como consumidores, no dejarse llevar por la relevancia de una marca o el marketing engañoso, porque eso puede costarnos tres euros más sin saber que el fabricante del yogur es el mismo en ambos casos.