El Watergate cañí, el Señor Lobo de Interior y la ‘cobardía’ de Podemos

Las élites españolas quisieron cerrar con maquillaje las heridas de la crisis económica e institucional que salpicó a la Casa Real, al bipartidismo y al establishment cañí. En 2014 dos hechos coincidieron en el tiempo: Podemos irrumpía con la intención de iniciar un proceso constituyente, y el independentismo catalán multiplicaba apoyos.

El Gobierno controlado por el Partido Popular quiso utilizar y dañar a la vez a los dos proyectos políticos: Pablo Iglesias vivía en los platós afines al Gobierno, pero posteriormente recibiría metralla sensacionalista perpetrada por Interior y vomitada por algunos medios.

El procés resucitó al nacionalismo español que enterró el aire renovador, pero algunos de sus líderes también sufrieron falsedades pagadas con dinero público. José Manuel Villarejo, el ‘Señor Lobo’, recibía consignas y tareas de Interior, que utilizaba su fuerza para derribar con inmundicia a los rivales políticos de la formación del Gobierno.

PÚBLICO DESVELA LA CACERÍA A PODEMOS

Patricia López, jefa de investigación de Público, ha demostrado su valía al desvelar que el Ministerio de Interior fabricó dossieres que acababan en las portadas de los anémicos periódicos de papel. El PP dice que no habla de causas que se están juzgando y Jorge Fernández Díaz se mantiene aforado como miembro de la Diputación Permanente del Congreso.

Explica Juan Carlos Escudier que «estamos ante uno de los mayores escándalos de la democracia desde la guerra sucia del Estado contra ETA (…) han conspirado contra el líder del tercer partido político del país, fabricando pruebas falsas para desacreditarle o robando información personal para chantajearle».

Podemos
Pablo Iglesias sufrió dossieres fabricados por Interior.

Añade el periodista que «han buscado elementos incriminatorios contra líderes independentistas catalanes; y han tratado de destruir documentos sobre la financiación ilegal del PP para proteger a sus dirigentes. En definitiva, han usado las cloacas del Estado para perjudicar a sus adversarios y para extender la impunidad sobre sus propios delitos».

PODEMOS BUSCA RESURGIR

Achicharrados por contradicciones, aletargados por las guerras internas y noqueados por el procés. Así se encontraba Podemos hasta el regreso de Pablo Iglesias, que sacó en su vuelta la retórica más agresiva para arremeter contra los grandes medios y animar a los ciudadanos a votar «contra los dueños de Atresmedia y Mediaset«.

El descubrimiento de esta guerra sucia supone una inyección de oxígeno electoral para Podemos, que según algunas voces podría recibir apoyos gubernamentales para reeditar un Gobierno de centro-izquierda.

Eso sí, Iglesias no está siendo honesto tras saberse que José Manuel Villarejo declaró el pasado juez ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón que Alberto Pozas, hoy vicedircom del Gobierno socialista, le entregó en 2016 un pendrive con la asistente del líder de Podemos.

El PP por ahora no se da por aludido pese a que Infolibre también ha desvelado que el Ministerio del Interior dirigido por Jorge Fernández Díaz «encargó a un confidente venezolano que colaborase con su policía política para obtener información perjudicial para Podemos y su secretario general, Pablo Iglesias» que acabó publicándose en Ok Diario.

INDA NIEGA QUE HAYA ESTADO A SUELDO DE VILLAREJO

Pablo Iglesias regresó hace diez días con un mitin y una entrevista en ‘La Sexta Noche’, programa contra el que cargó: «Vosotros perdéis prestigio cada sábado que un periodista de cloaca como Eduardo Inda viene a este programa. Sé que en el fondo sabes que tengo razón, pero no lo puedes reconocer».

Eduardo Inda fue la estrella del programa de anteayer. Iñaki López, presentador de la tertulia, se interesó por su relación con Villarejo: «Se acusa a algunos periodistas de estar a sueldo de Villarejo. ¿Alguna vez has cobrado del comisario Villarejo?».

El director de Ok Diario afirmó que «nunca de nadie salvo de mis empleadores y ahora mismo de mi periódico y los que digan eso van a tener la pertinente querella» y que sabe «que a Pablo Iglesias le habían dado 272.000 dólares de la dictadura venezolana y que lo había depositado en el paraíso fiscal de Granadinas».

OTROS DARDOS DE IGLESIAS

En diez días Pablo Iglesias ha sacado tiempo de visitar los medios mayoritarios y atacar a sus cúpulas. Lo hizo con especial vehemencia en Telecinco: «Yo estoy encantado de estar en esta casa siendo entrevistado. Siempre he estado muy a gusto. Pero eso no me impide decir que este medio sea propiedad de un italiano, la familia Berlusconi, primero como español, me gusta regular; y segundo que sea un tipo que estuvo en orgías con menores de edad, me revuelve el estómago».

En ‘El hormiguero’, de Atresmedia, el atacado fue su presentador estrella: «Ferreras, que es un periodista súper inteligente, por lo visto sacó cinco veces un vídeo que era como, Vox y Podemos son iguales, Vox y Podemos son iguales. Yo creo que la gente no es imbécil. Vox y Podemos no tienen nada que ver».

Ferreras le contestó: «Iglesias, que es un político inteligente, debe saber que esto es falso. O no lo ha visto o se lo han contado muy mal. Claro que Podemos y Vox no son lo mismo. Pero frente a los medios de comunicación en esta campaña están respirando una misma melodía. La pregunta es ¿por qué? ¿Por qué ese juego de Pablo Iglesias frente a los medios o a los poderosos? Son los mismos medios con los que Podemos logró resultados electorales impresionantes«.

Podemos
Antonio García Ferreras también ha recibido ataques de Iglesias.

El secretario general de Podemos también acusó al Grupo PRISA de presionar a Pedro Sánchez para que se abstuviese ante la investidura de Mariano Rajoy en 2016. Lo hizo en la Cadena SER, pero en este caso el dardo hizo agua porque Juan Luis Cebrián ya no dirige el multimedia.

Es evidente que Pablo Iglesias tiene el derecho de utilizar electoralmente la infamia que sufrió. Pero también es cierto que Podemos tiene silencios espesos sobre cargos del PSOE y otras élites. Los morados, por desgracia, han decidido centrar su ira solo en Eduardo Inda, blanco fácil para evitar algunas guerras que al partido no le convienen. A la democracia le vendrían muy bien.