Vehículos eléctricos: se matriculan en un mes los mismos que antes en un día

En las últimas seis semanas se han dejado de matricular 4.250 unidades de vehículos eléctricos, a causa del frenazo en la economía derivado del covid-19. Las estimaciones las facilitan la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE) y la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (GANVAM). El alcance de la caída se calibra mejor en términos relativos: se han matriculado en un mes, los mismos vehículos eléctricos que antes se matriculaban en un solo día (86 turismos, lo que supone un descenso del 86,3%).

De manera que las ventas de eléctricos puros de todo tipo en abril se saldaron con una caída del 72,1% y un volumen cercano a las 414 unidades, de las que apenas un 20,7% corresponden a turismos. De hecho, más de las tres cuartas partes de las ventas del pasado mes se registraron en el sector de las dos ruedas que, aunque redujo sus matriculaciones más del 15%, es el que sale mejor parado de esta crisis. La razón es el aprovisionamiento de flota para dar respuesta a los servicios de motosharing con la vista puesta en la desescalada. De hecho, la firma Silence Urban EcoMobility (Acciona), concentra más de 260 unidades matriculadas en abril.

Con estas cifras en la mano, ambas asociaciones corrigen a la baja sus previsiones para el cierre de 2020, pues si bien se necesitaba terminar el ejercicio con unas 65.000 unidades (+170%) de vehículos eléctricos de todo tipo para ir cumpliendo las fases planteadas en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), el impacto del coronavirus las recortará en el peor de los casos hasta el entorno de las 28.000 unidades (+15%).

PLANES DE INCENTIVACIÓN DE LA DEMANDA

Reconducir el rumbo del mercado dependerá del ritmo de activación de los planes de incentivo a la demanda, «que sirvan para insuflar confianza en el consumidor», explican desde AEDIVE. En este sentido el reciente anuncio de una nueva edición de ayudas a la movilidad eficiente será un balón de oxígeno para el mercado, máxime con mejoras como la eliminación de la exigencia del achatarramiento para acceder a las ayudas o la flexibilidad para gestionar las adquisiciones por renting.

De esta forma, se apoya en mayor medida a los canales que registran más del 80% de las matriculaciones de eléctricos y que no podían acceder a estímulos adicionales para acelerar el ritmo de electrificación de las flotas por no contar con vehículos antiguos para achatarrar.

No obstante, en opinión del presidente de GANVAM, Raúl Palacios, “hace falta un plan global de choque urgente para contener el desplome económico y evitar la destrucción de empleo, de lo contrario, las empresas no tendrán confianza para invertir en la renovación de flotas», afirma.

«Hay que poner en marcha un plan de incentivo a la demanda ambicioso que apoye todos los sistemas de propulsión y completarlo con medidas contundentes orientadas a que las empresas puedan proteger los puestos de trabajo y, con ello, la renta disponible porque, de lo contrario, la reactivación del consumo y de la propia inversión será complicada”, concluye Palacios.

Para el director general de AEDIVE, Arturo Pérez de Lucía, “los datos de abril ponen de manifiesto más que nunca la necesidad de activar el MOVES2020 por parte del IDAE a la mayor brevedad, tal y como ya ha anunciado el Gobierno, ya que tras la publicación de bases, cada Comunidad Autónoma tendrá que sacar su propio plan, lo que nos llevaría, en el mejor de los casos, a contar con ayudas a la compra de vehículos eléctricos a partir de junio”.

Precisamente por eso, Pérez de Lucía insiste en la necesidad de que no se bloquee su tramitación al amparo de un plan de ayudas estructurales para el sector automoción a gran escala por la crisis económica derivada del covid-19 que, por otro lado, “es imprescindible, pero que ha de estar sujeto a otro plan dotado con un presupuesto acorde a las necesidades de las fábricas españolas, sus proveedores, los concesionarios y la postventa”, resume.

LA ACCIÓN DECISIVA DEL GOBIERNO

El Gobierno ha reiterado, hace tan sólo unos días, su apuesta por la movilidad eléctrica y por los ejes del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), que establece un objetivo de 5 millones de vehículos eléctricos en nuestro país para 2030, según confirmaron tanto la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, como el Director General del Instituto para la Diversificación y ahorro de la Energía (IDAE), Joan Groizard.

“Esta nueva década comienza como un punto de inflexión para la movilidad eléctrica y nos enfrentamos a una situación sin precedentes cuya respuesta es, en primer lugar, contener los efectos de la situación sanitaria, y enfocar las decisiones a la reorientación económica”, señaló Aagesen, quien respondió con un sí categórico a que el vehículo eléctrico siga siendo una prioridad del Gobierno.

Tanto la secretaria de Estado de Energía como el director general del IDAE desgranaron algunas de las medidas de la línea de ayudas MOVES2020, “que hemos reformulado en base a los inputs de las comunidades autónomas y de documentos de trabajo como el Plan 60 remitido por AEDIVE de medidas fiscales para lograr el objetivo de 5 millones de vehículos a 2030”, dijo Aagesen. El presupuesto en un 40% respecto a 2019 hasta alcanzar los 65 millones de euros, según desvelaron ambos representantes públicos.

María Castañeda
María Castañeda
Redactora de MERCA2 de empresas y economía; especializada en energía, sostenibilidad y turismo.